El presidente nacional del Partido Popular y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pablo Casado, ha prometido este viernes en Burgos una "revolución fiscal" sólo equiparable a la vivida en España ante la entrada en la Unión Europea.
Casado, quien ha participado en un acto informativo de actualidad organizado por el Grupo Promecal, ha destacado la importancia de seguir creando empleo y condiciones para favorecer que empresas, autónomos e innovadores puedan generar nuevos puestos de trabajo.
El candidato del PP -que ha sido definido por el presidente de los 'populares' de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, como un hombre "orgulloso de su familia" y con raíces en la Comunidad- ha apostado por impulsar un plan de choque que prevea disminuciones en impuestos como el IRPF o el IVA, así como la supresión de otros como el de sucesiones.
Racionalización del sector público
Este plan deberá acompasarse con una racionalización del sector público, con el objetivo de lograr una administración "más austera" que permita, por ejemplo, crear en cinco días hábiles una empresa, para lo que Pablo Casado ha apostado por una oficina que permita a empresas y autónomos una mayor facilidad en sus trámites.
Casado ha explicado que todo ello deberá complementarse con un entorno laboral que favorezca la competitividad laboral, que no encarezca la contratación, una nueva reforma educativa que potencie la Formación Profesional Dual y los estudios universitarios.
Arropado por el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, y el de las Cortes Autonómicas, Ángel Ibáñez, Pablo Casado ha insistido en que este proyecto servirá para el conjunto de España y también para Castilla y León.
