Ciudadanos exige al PP la alcaldía de Madrid a cambio de su apoyo en la Comunidad de Madrid, Castilla y León y Murcia. El partido naranja mantiene el pulso para que Begoña Villacís y no José Luis Martínez Almeida sea investida alcaldesa de la capital española el próximo sábado.
El presidente del PP, Pablo Casado, ha dicho públicamente que la única opción es Almeida, pero el partido naranja presionará hasta el último segundo en el resto de territorios donde los populares les necesitan.
Ciudadanos quiere Madrid a cambio de su respaldo al PP en tres comunidades en las que ha podido apoyar al PSOE para favorecer el cambio. En Madrid, Castilla y León y Murcia, el partido naranja ha rechazado pactar con los socialistas, pese a que son tres gobiernos autonómicos que llevan más de dos décadas consecutivas de gobiernos populares. Más de 30 en el caso de Castilla y León.
Cs: desgaste y recompensa
Los de Rivera argumentan que esta decisión ha supuesto un desgaste, especialmente en casos como Castilla y León. El candidato naranja Francisco Igea era proclive a llegar a un acuerdo con Luis Tudanca. Y en Murcia, por ejemplo, Ciudadanos ha rechazado la alcaldía de la capital murciana que le ha ofrecido el PSOE.
Rivera quiere que ese desgaste, también interno, que están teniendo estos acuerdos por la participación de Vox, en algunos casos tenga su recompensa. El partido naranja pelea por la presidencia de Aragón, de momento bloqueada por la negativa del PAR (Partido Aragonés), y la alcaldía de Madrid. Y así van a exigirlo hasta el final de las negociaciones. No hay demasiado plazo. Los Ayuntamientos de toda España se constituyen este sábado.
El PP, por su parte, sostiene que Madrid es Carmena o Almeida. Pablo Casado lo dejó muy claro tras su entrevista con Pedro Sánchez en el Congreso. No hay otra alternativa para la alcaldía de Madrid. El PP ha optado por un prietas las filas. Y ni en público ni en privado reconoce ese acuerdo para ceder Madrid a Villacís.
El PP asegura que nunca ha pensado en canjear el Consistorio madrileño por la presidencia de la Comunidad y otras presidencias. "La vía Villacís", como se le conoce en ámbitos del PP, no existe.
El PP lo niega
"Es una ensoñación disparatada", comentan estas fuentes. La líder municipal de Ciudadanos ha de hacerse cargo de que quedó tercera en las elecciones del 26-M. Por lo tanto, según estas fuentes, debe abandonar toda pretensión de aspirar a la alcaldía. El equipo de Teodoro García Egea, el número dos de Casado y responsable máximo de todo el proceso negociador, confía en que la sensatez se imponga finalmente en Ciudadanos.
Ciudadanos es un interlocutor muy complicado, al decir del PP, ya que incurre en constantes cambios de planteamientos. El viernes pasado, el encuentro entre populares y naranjas para avanzar en el pacto de la alcaldía de Madrid terminó como el rosario de la aurora.
No se han vuelto a celebrar conversaciones. Los delegados de Cs se han cerrado en banda. Parece que no hablarán hasta el propio viernes, vísperas del 'día D', cuando se constituyen los ayuntamientos de toda España. "Villacís tiene que tener muy claro que si no es Almeida, será Carmena, y ella lo tendrá que explicar a sus votantes y no es labor muy sencilla", insisten en los círculos mencionados.
Vox entrará en el Gobierno
En la Comunidad el ambiente es distinto, aunque también erizado de problemas. Isabel Díaz Ayuso mantiene un nivel de interlocución aceptable con Rocío Monasterio, de Vox. La dirigente de la formación de Abascal desvelaba este martes un acuerdo alcanzado con el PP para diseñar un gobierno. Vox quiere situarse en áreas de poder. El pacto en cuestión no hace referencia a un reparto de consejerías, pretensión inicial de Vox, sino de incluir a Vox en 'entes y presupuestos', tal y como señalan desde el PP. En cualquier caso, es un paso más allá del famoso 'pacto a la andaluza', mediante el que el PP se aupó a la presidencia de la Junta en un gobierno de coalición con Ciudadanos pero sin presencia de Vox en el Ejecutivo.
Abascal quiere formar parte del Gobierno de Madrid. De una u otra forma. Le corresponde proporcionalmente. Ya ha conseguido una silla en la Mesa de la Asamblea. Vox estaba dispuesto a tirarlo todo por la borda diez minutos antes de que arrancara el pleno de la Cámara. Ahora le toca entrar en el Ejecutivo. Ciudadanos, sin embargo, no contempla tal posibilidad. Más bien, todo lo contrario. Fuentes de la formación naranja aseguran que si Vox entra en el Ejecutivo madrileño, ellos no apoyarán la presidencia de Ayuso. Todo se andará, comentan en Vox, conscientes de que sus 12 escaños son fundamentales para decidir el color político de la Comunidad de Madrid.
Tiempo al tiempo. Rivera tendrá que modular su firmeza y suavizar sus condiciones, añaden. "Hay muchas formas de superar discrepancias, como han hecho Aguado y Monasterio", concluyen. En el PP nadie duda de que los dos gobiernos madrileños les corresponden y serán suyos.