Los electores castigan la política de pactos del Partido Socialista. El PSOE de Pedro Sánchez se quedaría con 109 diputados frente a la subida del PP hasta los 103 parlamentarios. Así lo refleja el primer barómetro de GAD3 para el diario Abc realizado tras la investidura del jefe del Ejecutivo, que consiguió por la mínima y en segunda vuelta alzarse con la mayoría simple necesaria para evitar el bloqueo.
Entre las elecciones de abril y las de noviembre, el PSOE se dejó tres escaños y pasó de tener 123 a 120 asientos en la Cámara Baja. Todo a pesar de que la estrategia de Ferraz de forzar la repetición electoral buscaba incrementar su fuerza en el Congreso. El trabajo de campo de la encuesta se realizó entre el 7 y el 10 de enero, así que recoge toda la negociación con los independentistas de ERC y el planteamiento de la coalición con Unidas Podemos.
Según refleja el sondeo, la estimación de voto del PSOE cae casi dos puntos respecto a las elecciones del 10-N y se habría dejado 14 escaños desde los comicios del pasado mes de abril. Por su parte, los morados -que contarán con cinco asientos en el Consejo de Ministros- recogen un retroceso de 3 parlamentarios y pasarían de 35 a 32 escaños si hubiera elecciones generales, con apenas cuatro décimas menos en porcentaje de voto. De esta manera, la coalición de los socialistas con el partido de Pablo Iglesias y sus confluencias retrocedería de los 155 parlamentarios actuales a 141 diputados. Tres más les daría Más País, el partido de Íñigo Errejón.
El efecto en el otro lado del espectro político es justo el contrario, donde el Partido Popular es la formación que se anota un mayor crecimiento. Así, la alianza de PP, Ciudadanos, Vox y Navarra Suma alcanza 24 parlamentarios más que el bloque de la izquierda, con 168 diputados. Los de Pablo Casado pasarían de los 89 actuales a 103 escaños, con un 2,4% más de votos. En las elecciones de abril obtuvo 65 diputados.
Por su parte, los de Santiago Abascal se mantendrían estables con apenas una décima de variación en porcentaje de voto y 51 parlamentarios en la Cámara Baja, uno menos que en los comicios de noviembre. Seguirían siendo el tercer partido más votado frente a un Ciudadanos que lograría mejorar un dos por ciento en intención de voto. Así, el grupo que dirige Inés Arrimadas tras la salida de Albert Rivera obtendría dos escaños más que en noviembre. aunque lejos todavía de los 57 cosechados en los comicios de abril.
Según la encuesta de GAD3, con estos números y si todas las formaciones repitiesen el sentido de su voto, no obtendría la investidura. ERC apenas perdería dos décimas aunque mantendría los 13 asientos en el Congreso, mientras que Junts per Catalunya obtendría uno más que los ocho actuales. Por su parte, EH Bildu pasaría de cinco a cuatro escaños.
