El portavoz de ERC en el Pacto de Toledo, Jordi Salvador, ha negado este miércoles que se haya desmarcado del acuerdo alcanzado para revalorizar las pensiones según el IPC real y ha dicho que lo analizará para ver si de verdad "este consenso" garantiza el poder adquisitivo de los pensionistas.
En rueda de prensa en el Congreso después de que la Comisión del Pacto de Toledo haya zanjado un acuerdo sobre la recomendación segunda para volver a indexar las pensiones a la inflación como planteaba la recomendación de 2011, Salvador ha dicho que la redacción actual se acerca a la propuesta de su formación.
Ha defendido que la subida con el IPC real debe ser revisable anualmente y sin condicionamiento según la situación económica y ha dejado claro que de ser así sería una victoria del movimiento obrero en general, los sindicatos y las "mareas" de pensionistas que se han movilizado.
Las dudas
Salvador ha afirmado que tienen dudas sobre la parte de la recomendación que alude a que sólo se financien con cargo a los recursos de la Seguridad Social los gastos correspondientes al estricto mantenimiento del poder adquisitivo de las pensiones y que toda subida por encima del IPC sea sufragada con cargo a otros recursos financieros.
Ha dicho que la redacción debe plasmar a qué mecanismo de financiación se refiere, si es vía impuestos o a costa de préstamos a la Seguridad Social.
Ha puntualizado que asegurar el equilibrio social y financiero es un concepto ambiguo y ha advertido de que esto podría estar muy ligado a la recomendación número uno del Pacto de Toledo sobre qué fuentes deben financiar el sistema público de pensiones.
"Estamos cerca"
"Es verdad que estamos cerca y creo que podríamos llegar a un acuerdo unánime pero que no hay tanta prisa. Estamos estudiando el documento para analizarlo con abogados y con otras fuentes para ver si se garantiza el poder adquisitivo de la pensiones", ha insistido. En su opinión, el consenso que representa esta recomendación podría no garantizar el poder adquisitivo.
La propuesta de ERC pide garantizar el poder adquisitivo de los pensionistas y la suficiencia de las pensiones por ley de manera estructural y afirma que, una vez elevado con el IPC real anualmente ajustado, otros incrementos de las pensiones que pudieran darse se financiarían en la forma establecida en el modelo actual de Seguridad Social.
"Y si los ingresos por cotizaciones fueran insuficientes se financiarán con aportaciones del Estado, no con préstamos, según establece el artículo 109.2 de la ley General de la Seguridad Social.