Profundo enfado en los círculos de Ada Colau. Así vivieron los Comunes el anuncio de la candidatura de Íñigo Errejón por Barcelona, liderada por un casi desconocido Juan Antonio Geraldes, exmilitante de Guanyem y 'número dos' de una anterior lista municipal en alianza con los independentistas de la CUP. Para los afines de Colau esa candidatura es de “usar y tirar” y dirigida a “robar” uno o dos escaños a la marca catalana de Podemos.
Geraldes, que militó con los Comunistes de Catalunya, facción liderada por Joan Josep Nuet, es considerado por los miembros del partido de Colau una cortina de humo dirigida a restarles votos. Una candidatura montada en pocos días con el único objetivo de intentar sustraer votos a los Comunes para buscar esos escaños que puedan servir a Errejón para tener un grupo propio en el Congreso. En definitiva, un planteamiento electoralista censurado por los de Colau.
Colau, según las fuentes consultadas, intentó hasta el último minuto evitar una candidatura de Más País en Barcelona. Ofreció incluso posibles acuerdos futuros, pero nada sirvió para convencer a Errejón. El ex 'número dos' de Podemos consideró que para una candidatura nacional era esencial desembarcar en Barcelona. Y así lo hizo, aunque recibió críticas internas, por ejemplo por parte de Clara Serra, que dimitió el pasado lunes.
Perfil soberanista
El problema para Colau es que el perfil soberanista del nuevo candidato de Errejón implica que su propuesta acabará dañando sobre todo a los Comunes, mientras que al PSC difícilmente le robará votos. Esta es la lectura que han hecho a lo largo del día de ayer varios miembros del partido de Colau, que hablan abiertamente de “traición” por parte de Errejón.
Los de Colau se han esforzado para convencer a Errejón. Este último, sin embargo, dejó que una persona de su confianza, Juan Iglesia, gestionara el desembarco de su partido en Cataluña. Iglesia, junto a miembros del viejo partido de Nuet, han controlado esta fase y han promocionado a personas de su sector. Se trata de jóvenes políticos de izquierdas pero que todos tildan de "soberanistas". Es decir, que no creen en la independencia unilateral pero sí en la celebración del referéndum de autodeterminación.
Desde Más País no hacen comentarios sobre la cercanía ideológica de Geraldes con el soberanismo catalán. Hace tan solo seis meses, Geraldes fue 'número dos' en una lista electoral de Guanyem respaldada por la CUP en Sant Boi. En esa campaña electoral participó en un mitín acompañado por el diputado autonómico de la CUP Carler Riera. Este pasado puede afectar a la imagen pública de una plataforma que, al menos de entrada, habla de "patriotismo" y afirma: "Primero España, después las siglas".
"Amiguismo"
Para varios miembros de la izquierda catalana la decisión de Geraldes tiene más que ver con el "amiguismo" que con los méritos del politólogo. En su canal oficial, Más País sostiene que Geraldes "cuenta con una amplia trayectoria en el activismo vecinal y estudiantil". "Su participación en política está marcada por la defensa del municipalismo, especialmente en el área metropolitana de Barcelona", añaden.
Los sherpas de Errejón sondearon varios dirigentes y políticos activos en Cataluña, como Joan Coscubiela y Raimundo Viejo, tal y como adelantó Vozpópuli, pero se decantaron finalmente por un rostro prácticamente desconocido. Coscubiela, según las fuentes consultadas, rechazó sumarse a Más País, mientras que Viejo ocupará un puesto en la lista.
