"Vox es un partido de extrema derecha", asegura Núñez Feijóo, y remacha que “Vox no es el PP y de ahí que cada uno diga lo que le parezca”. El líder gallego del PP acota así las palabras de Isabel Díaz Ayuso, candidata a la Comunidad de Madrid, quien había afirmado que “todo lo que dice Vox ya lo ha hecho el PP”.
Pocos en el PP se refieren a Vox como “extrema derecha”. No lo hace Casado, ni la cúpula de Génova, ni muchos de los dirigentes locales y regionales. Feijóo, que cada vez va más por libre, pese a su respeto formal e institucional hacia la dirección nacional, procura poner en su sitio a Vox cada vez que tiene oportunidad. Ya les paró los pies con su empeño en acabar con las autonomías y, durante las negociaciones en Andalucía, se manifestó muy decidido en contra de la teoría sobre que “la violencia de género no existe sino que es violencia doméstica”, un debate que también bulle en el seno del PP. Unas palabras inconvenientes para Génova ya que se produjeron en plenas conversaciones con el partido de Abascal para recibir sus 12 diputados de cara a la investidura en Andalucía.
Feijóo ha recordado que en su partido hay muchas sensibilidades, no es de pensamiento único y hay liberales, conservadores, centristas, y cada uno puede decir lo que le parezca, dentro de la línea, naturalmente, que dibuja y señala la dirección. A dos días del comienzo del cónclave de los populares, Feijóo reivindica su papel de abanderado del centrismo reformista que en su día apoyaron Fraga, Aznar o Rajoy y que, ahora, a su criterio, también defiende Casado.
Sobre su posible viaje a Madrid, para asumir más responsabilidades en el partido, Feijóo se ha limitado a repetir su argumentación tradicional: el presente y el futuro del PP es Pablo Casado porque ganó un congreso y así lo han decidido los militantes, “por lo tanto, no hay nada más que hablar. Es lo que dije en junio y lo mantengo ahora”. Insiste que el PP tiene “larga vida”, si nos mantenemos firmes, si hacemos el partido alternativo a la izquierda, aunque la izquierda está empeñada en fraccionarnos, en insistir que “el PP es un partido de derecha extrema, eso lo decían ya con Zapatero, y ahora lo repite Pedro Sánchez” .
