En la inauguración del nuevo consultorio médico del municipio toledano de Cobisa, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha subrayado que "no hay en España espacio para el privilegio; los que quieren más lo quieren a costa de que los demás tengamos menos".
"Por lo tanto -ha añadido-, yo voy a pelear mucho por los símbolos que nos hacen más iguales, los que reflejan la Constitución del 78".
"Pero no solo es un problema simbólico ni de convicción, es un problema práctico; lo de Cataluña no puede acabar arreglándose con un cheque, yo creo que ni siquiera ellos lo quieren porque sería inmoral", ha opinado el presidente castellanomanchego.
A su juicio, la cuestión de Cataluña "no se puede arreglar así" porque, según ha argumentado, "en las cosas de todos decidimos todos".
Las advertencias de García-Page ante la sentencia de Junqueras
Al respecto, ha advertido: "Ya se lo digo a todo el mundo: vamos a estar ojo avizor porque en aquello que nos afecte, como yo vea que se ponga en cuestión la capacidad de renta y la igualdad de mis ciudadanos, no tengan la más mínima duda de que ejerceré mis atribuciones constitucionales".
En este sentido, y refiriéndose al posible pronunciamiento de la Abogacía del Estado de la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE que reconoce la inmunidad del líder republicano, Oriol Junqueras, ha indicado que, "incluso, van a querer que se resuelva la crisis política y de gobierno en España con una sentencia de un abogado".
Se pretende que se resuelva "con un informe jurídico", ha apuntado García-Page, quien ha aseverado que "es absolutamente increíble" porque "debe de estar alucinando casi cualquier dirigente político en el mundo que un abogado resuelva si hay o no gobierno".
Asimismo, ha manifestado que echa de menos un pronunciamiento "de aquellos que están apuntados a la demagogia, que han hecho de su vida política una carrera pidiendo que no haya aforamientos, que los que son diputados, senadores o diputados europeos tengan el mismo trato ante la justicia".
"A mí me gustaría que se levante la inmunidad a todos los que están procesados para que la justicia española pueda ser igual para unos que para otros", ha apuntado García-Page, porque sabe "que si yo hubiera hecho como presidente lo que han hecho desde las instituciones en Cataluña, me hubieran aplicado la ley".
"Y no es un problema de justicia, es un problema de igualdad", ha sentenciado.