Tuvo que suceder, aceleradamente, a Pedro Antonio Sánchez al frente de la Región de Murcia. Fernando López Miras, a punto de cumplir 34 años, se convirtió en mayo de este año en el presidente de su comunidad como relevo natural de quien fue su gran padrino y mentor durante años.
Sánchez acaba de anunciar que deja no sólo el acta de diputado sino que también abandona la presidencia regional del PP, cargo para el que fue elegido por abrumadora mayoría de la militancia hace tan sólo unos meses. Imputado en dos causas relacionadas con la corrupción, como son los casos Púnica y Auditorio, Sánchez ha salido de la política animado desde la cúpula de su partido. En Génova se hacía insostenible que comandara el aparato de esa región un personaje en el ojo del huracán del escándalo.
López Miras es un político joven, de la cosecha de Nuevas Generaciones, que ha desarrollado toda su carrera política a la sombra de PAS, quien le señaló como su sucesor en la jefatura del Gobierno cuando se vio forzado a abandonar el cargo por las exigencias de Ciudadanos. El PP gobierna Murcia gracias al apoyo de Rivera, quien desde el principio exigió la salida del presidente doblemente imputado.
Génova quiere una sucesión sin ruido, sin discusiones y sin sobresaltos. López Miras se convertirá posiblemente este viernes en el presidente del PP murciano. La cúpula nacional confía en él, sabe que PAS, que maneja aún importantes resortes del partido, le va a amparar y a defender. Tampoco agradan las bicefalias en Génova, donde se apoya tradicionalmente que sea el jefe del Ejecutivo de una región quien también ocupe la presidencia del partido en esa zona. Fernando Maíllo, coordinador general del PP, defendió a PAS hasta el límite de lo razonable. Ahora apoyará a su sucesor, que se convertirá en el cuarto presidente regional en cinco años.
Apenas oposición interna
No habrá congreso. Miras será colocado en el vértice de la organización en un cónclave especial de la junta directiva. Allí será consagrado líder supremo de la formación amen de candidato en las autonómicas de 2019, donde el PP confía en recuperar su mayoría absoluta. Tampoco se esperan en Madrid enormes convulsiones con este relevo. Apenas se aprecian vestigios incandescentes de oposición a PAS, y menos aún los habrá de oposición a Miras. En medio de tantas convulsiones, el PP murciano no esta para batallitas internas.
López Miras, licenciado en Derecho y con un Máster de Administración de Empresas, fue el coordinador territorial del PP en la comunidad, fiel escudero de PAS, es diputado y miembro de la Junta Nacional. Tiene dilatada experiencia parlamentaria ya que ha ejercido de presidente y portavoz de numerosas comisiones en la Asamblea regional.
