Izquierda Unida (IU) cree que las alianzas que aspiran a formar con Podemos y el resto de actores "del cambio" para las municipales, autonómicas y europeas de 2019 no se deben empezar a construir por el nombre, ya que antes hay que "concretar" cómo deben ser esas candidaturas conjuntas para que todos los socios se sientan "cómodos", y centrarse en cómo van dar respuesta a las demandas de la ciudadanía, según han explicado a Europa Press fuentes de la dirección federal de la coalición de izquierdas.
De este modo, la organización liderada por Alberto Garzón considera prematura la condición que el líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha puesto sobre la mesa de negociación este sábado, consistente en que la marca del partido morado deberá estar visible en todas las candidaturas, salvo excepciones, si así lo avalan sus militantes en las consultas que van a convocar.
En este sentido, IU defiende que la prioridad ahora debe ser la de "concretar" las candidaturas conjuntas que tanto ellos como Podemos han mostrado su voluntad de conformar, buscando sumar al mayor número de actores del cambio y garantizando que todos están "cómodos" con los términos elegidos.
Además, la federación de izquierdas también cree prioritario estudiar en conjunto cuáles son las mejores formas para dar respuesta a las demandas y exigencias que está planteando la sociedad en las diferentes movilizaciones que se están produciendo, como las de los pensionistas o las mujeres a favor de la igualdad.
"Cuando ya se sepa la voluntad de todo el mundo"
Es decir, creen que las confluencias que ya han empezado a negociar para las próximas citas electorales no se pueden comenzar a construir en torno al nombre sino que esta debe ser una cuestión que se deberá afrontar "cuando ya se sepa la voluntad de todo el mundo" y cuando todos los actores se sientan cómodos en el hipotético acuerdo que se alcance.
El movimiento que ha realizado Iglesias en la reunión de la dirección de su formación de este sábado, y que también ha generado críticas dentro de Podemos en algunos territorios como Andalucía, se produce en plenas negociaciones con IU.
De hecho, los secretarios de Organización de ambas formaciones tenían previsto cerrar un principio de acuerdo este mes de abril, aunque todavía no se había concretado el alcance de dicho acuerdo, precisamente por los escollos que suponían cuestiones como el nombre, o el método para confeccionar las listas.
Negociaciones complicadas
Tras la condición planteada por Iglesias, las negociaciones podrían complicarse aun así, sobre todo teniendo en cuenta que IU lleva meses pidiendo más visibilidad a su socio parlamentario, con vistas también a las candidaturas que se formen para 2019.
No obstante, IU no ha querido entrar de momento a comentar qué le parece dicha condición en concreto y las fuentes consultadas se limitan a señalar que la cuestión de los nombres no debe ser una prioridad ahora, sino que se debe abordar más adelante, cuando se hayan concretado las candidaturas conjuntas, garantizando, eso sí, que "todos los actores están cómodos".
Asimismo, la coalición liderada por Garzón ha aprovechado para reafirmar su intención de presentarse a todas las citas con las urnas previstas para el año que viene --las andaluzas, municipales y autonómicas, y europeas--, así como de concurrir junto "al resto de fuerzas del cambio".