Los cambios políticos en las urnas ya se notan en Navarra. No habrá grandes banderas ni pancartas reivindicativas en el chupinazo de las próximas Fiestas de San Fermín. Al menos eso es lo que pretende el nuevo equipo de gobierno del Ayuntamiento de Pamplona, liderado por el alcalde, Enrique Maya (Navarra Suma).
Con esta medida, la coalición que engloba a UPN, PP y Cs pretende evitar que el chupinazo se convierta en un momento de reivindicación política. Tradicionalmente, afines a la izquierda abertzale exhiben en la plaza consistorial ikurriñas y pancartas alusivas a los presos de ETA justo antes del lanzamiento del tradicional chupinazo que da inicio a las célebres fiestas de Pamplona.
La medida está recogida en el bando de San Fermín firmado por el alcalde de Pamplona, con las disposiciones para fiestas en aspectos como el cumplimiento de las ordenanzas, el tráfico, la organización de eventos como Chupinazo, Encierro o Encierrillo o la estrategia contra las agresiones sexistas, informa Europa Press.
Novedades de San Fermín
La principal novedad de este año es que a las habituales prohibiciones de entrar en la Plaza Consistorial y en la Plaza del Castillo con palos, envases de vidrio o latas de bebida que no estén abiertas, se añade la de acudir a estos céntricos lugares con "banderas o telas de gran tamaño con las que se pueda cubrir a un elevado número de participantes, que puedan ocasionar movimientos de masas indeseados, o cualquier otro elemento susceptible de originar daños directa o indirectamente".