Veintitrés días. Es lo que habrá tardado el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, en comparecer públicamente tras los malos resultados obtenidos por su partido en las elecciones catalanas del 21 de diciembre. Lo hará este sábado ante la plana mayor de la formación morada, donde presentará el informe que analiza lo sucedido en 2017 y que fijará la hoja de ruta de Podemos para el nuevo ciclo electoral que terminará con las elecciones generales de 2020.
Iglesias expondrá las líneas maestras de la nueva política de Podemos ante el Consejo Ciudadano estatal -el máximo órgano de dirección entre asambleas- que se reunirá en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Entre los cerca de 80 asistentes que someterán el texto a debate estarán los secretarios generales autonómicos de la formación, que intervendrán ya a puerta cerrada. Iglesias ha estado coordinando este informe desde su vuelta de las vacaciones navideñas, explican fuentes del partido.
La prioridad pasa por volver a colocar los "problemas de la gente" en el centro del debate político, intentando relegar a un segundo plano la crisis territorial en Cataluña. El debate territorial, reza el informe adelantado por varios medios, "no es el único ni el más importante problema de España". Podemos culpa al desafío independentista de haber provocado que temas como la precariedad laboral, la crisis de las pensiones o los recortes en sanidad hayan quedado escondidos tras la dialéctica del conflicto. Esta fue la misma estrategia que guió la campaña de sus socios en Cataluña, Catalunya En Comú-Podem, y que se saldó con la pérdida de tres escaños.
Este mismo miércoles, el secretario de Organización, Pablo Echenique, hacía un primer análisis del fiasco catalán tras la primera reunión de la Ejecutiva desde el 21-D. Allí atribuyó la pérdida de escaños en los comicios tanto al escenario de polarización entre bloques, como a la incapacidad del partido de hacer llegar su mensaje a los ciudadanos a través de los medios. Asimismo, volvió a defender como única solución la celebración de un referéndum pactado y con garantías y rebajó la importancia de las encuestas.
Otro de los grandes ejes del planteamiento de Iglesias girará en torno a la denuncia del "bloque monárquico". Es decir, que redoblará sus ataques al PSOE de Pedro Sánchez que decidió respaldar al Gobierno de Mariano Rajoy en la aplicación del artículo 155 en Cataluña. Sobre todo, en un momento en el que el secretario general de los socialistas está desplegando una estrategia para intentar robar la iniciativa a Iglesias en lo que respecta a la agenda social.
En este sentido, la estrategia de Podemos también pasará por presentarse como la única formación política con capacidad de ganar unas elecciones y ofrecer una alternativa al PP. Precisamente, el grupo parlamentario de Unidos Podemos reforzará su labor de oposición al Gobierno, como aseguraba este jueves la portavoz Irene Montero.
El pulso de IU
Esa misma rueda de prensa, Montero tuvo que responder acerca del informe de Izquierda Unida y capitaneado por Alberto Garzón, en el que da un plazo de tres meses a la formación morada para aclarar los términos de su alianza de cara al ciclo electoral que se abre con las autonómicas y municipales de 2019 y se cierra con las generales de 2020.
Garzón defenderá su texto ante la Coordinadora Federal de su partido casi a la misma hora que Iglesias intervendrá ante los suyos. Por lo pronto, desde Podemos dejaron claro que desconocían la existencia de tales demandas y creen que aún es demasiado pronto para hablar de la configuración de las listas. Lo atribuyen además a un mensaje de Garzón de puertas para adentro y dejan claro que la prioridad pasa por reforzar y fortalecer lo que denominan el "espacio del cambio".
En este sentido, Podemos debe concretar las alianzas a nivel autonómico y municipal a lo largo de los próximos meses. Pero mientras que desde Izquierda Unida reclaman un Acuerdo-Marco para todo el Estado, la dirección de Podemos se muestra más favorable a la negociación a la carta en cada territorio.
