"Ante los hechos inadmisibles protagonizados por el alcalde de Vita, Antonio Martín, que no es afiliado del Partido Popular, abandonará el Grupo Municipal del PP. Reiteramos nuestro compromiso contra toda actitud vejatoria contra las mujeres y menores". Así ha zanjado la situación el Partido Popular de Ávila respecto al edil que cantó una canción en la que se hacía "apología de la pederastia".
"Me encontré una niña sola en el bosque, la cogí la manita y la metí en mi camita. Le subí la faldita, le bajé la braguita… y la eché el primer caliqueño", cantaba el alcalde con un micrófono en la mano. Lo hacía delante de los vecinos del pueblo de Ávila, de menos de un centenar de habitantes.
El PSOE y Podemos ya habían pedido al Partido Popular que cese "de inmediato" al alcalde del municipio de Vita por cantar una canción que "hace apología de la pederastia y de la violación". También lo hizo la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, que afirmó que era "repugnante". "Estudiaremos todas las medidas posibles. Tolerancia cero a la cultura de la violación. Tolerancia cero a las violencias contra la infancia", añadía en un mensaje en X.
El PP expulsa al alcalde de Vita
Ha sido el propio Partido Popular el que ha tomado cartas en el asunto, expulsando a Marín del grupo municipal y tachando los hechos de "inadmisibles".
Otros miembros del grupo también exigieron la marcha del edil, afirmando que la candión es "repugnante y ofensiva" y que dicho alcalde "no va a estar un minuto más representando las siglas del partido". "La violencia contra las mujeres y las niñas no cabe de ninguna forma en ningún contexto, en ninguna circunstancia", ha dicho el portavoz adjunto del PP en el Ayuntamiento de Ávila.
Yorick
Otro caso en el que la pederastia está en la cabeza del que escucha, más que en las palabras del que canta. Los laísmos en que incurre el cantante sí que son graves, incluso para un alcalde de pueblo.
Pepepelotas
No se cuando el PP va a enfrentarse a la izquierda represiva como se merece y deja de hacerles caso en este tipo de cosas, sin duda de poco buen gusto, pero que no deja de ser una canción de origen argentino. Resulta que el PP por esto hace dimitir a una alcalde y el de Soria del PSOE se pasea en un papa móvil emulando echar bendiciones, bajo los efectos etílicos en el mejor de los casos, y nadie lo ha dimitido. La izquierda llama apología de la pederastia a una canción y exige dimisiones y ellos sueltan a los delincuentes sexuales condenados por ello, algo no funciona bien. A ver si el PP suelta su complejo y defiende las cosas como debe de ser y se deja de seguir las normas bananeras.