Dime cuánto debes... El PSOE disparó su deuda con los bancos más de un 77% entre 2022 y 2023. Según su desprende del portal de transparencia del partido, los socialistas cerraron el ejercicio 2023 con una deuda con las entidades de crédito de 27,6 millones de euros. Mientras que en el cierre del ejercicio anterior, el montante era de 15,5 millones.
Ferraz tiene obligaciones con dieciséis entidades de crédito: Caixabank, Santander, BBVA, Ibercaja, Sabadell, Cajamar, Unicaja, Abanca, Caja Rural de Jaén, Cajasur, Caja Rural de Teruel, Eurocaja Rural, Caja Rural de Zamora, Kutxabank, Caixa Conlonya y Cajalmendralejo. Y todas con un tipo de interés que oscila entre el 0% y el 8,7%.
Fuentes socialistas precisan: "Estas fluctuaciones se deben a que la deuda electoral se encuentra respaldada por los resultados electorales y su período de amortización es de 1 año o menos, al coincidir con el cobro de las subvenciones electorales correspondientes. Si bien la deuda total aumenta por el efecto de este componente, la tendencia decreciente de la deuda ordinaria de funcionamiento refleja los esfuerzos de la organización por sanear y fortalecer sus finanzas".
Pero los problemas para el partido no terminan ahí. Sus ingresos provenientes de los afiliados, en forma de cuotas y/o donaciones, descendieron un 7,9% de un ejercicio a otro: de 21,5 millones a 19,8. Hay que recordar que a finales del año pasado, este diario reflejó que el PSOE ha dado de baja 15.349 carnés de militancia desde que Pedor Sánchez llegó a la secretaría general.
Por aquel entonces, en noviembre de 2023 y siempre según fuentes de Ferraz, los socialistas tenían un censo de 172.000 afiliados, a los que llamaron a votar en la consulta sobre los acuerdos de Gobierno con Sumar y el resto de fuerzas independentistas. Ferraz se defiende cuando se le pregunta al respecto y zanja que, a diferencia de otros partidos -en referencia al PP-, los militantes socialistas "están al corriente [de pago]".
Lo cierto es que es difícil conocer al detalle los datos de afiliación del PSOE, porque los gestiona directamente la planta noble del partido, custodiados por el secretario de organización, Santos Cerdán. Al igual que los datos económicos. En total, el partido recibió en 2023 más de cincuenta millones de euros de dinero público (56,1), casi dos más que el ejercicio anterior (54,6).
Cabe reseñar que, aproximadamente, ocho de cada diez euros que reciben los partidos políticos, incluido el PSOE, proceden de las arcas del Estado. Ferraz fijó un techo de gasto financiable de 17,6 millones para las elecciones generales de julio de 2023. Según el resultado que obtienen los partidos, así se les incrementan luego las arcas.
El Gobierno decreta el precio en el BOE. La noche electoral del 23-J, los tesoreros del partido sacaron la calculadora con los resultados delante. 21.167,64 euros por cada escaño que lograron en el Congreso de los Diputados y en el Senado. Solo por eso, los socialistas se embolsaron 4.106.522,16 euros gracias a los 194 representantes que lograron en el Congreso (122) y en el Senado (72).
El montante, sin embargo, no acaba ahí. El partido también sumó 0,81 euros por cada uno de los votos que tuvieron las candidaturas al Congreso en las que al menos uno de sus miembros consiguió escaño. Y 32 céntimos más por cada papeleta que lograron los candidatos que ocuparon asiento en el Senado -las listas en la Cámara Alta son abiertas-. A pesar de las subvenciones por gasto electoral, todos los grandes partidos gastan más de lo que reciben. Y el PSOE no es una excepción. En 2023, el partido se dejó 38,6 millones de euros en gastos de operaciones de la actividad electoral.
Para obtener financiación pública, un partido político debe acreditar que está al corriente de sus obligaciones tributarias. Si no las presenta ante el Tribunal de Cuentas -el órgano que fiscaliza su actividad económica- y las hace públicas, la ley prevé la retención de las subvenciones. Los tesoreros escudriñan con mucho interés las encuestas.
El subsidio por los gastos electorales depende de lo que dicten los españoles en las urnas. Pero los partidos también reciben dinero público en concepto de gastos ordinarios de funcionamiento -estatal y autonómico- y por la actividad de los grupos parlamentarios en las Cortes y en las Asambleas autonómicas. Cada concejal y representante en cabildos y diputaciones cuenta. La Administración les subvenciona por ellos y, además, por los gastos de seguridad: por ejemplo, poner alarmas en sus sedes. Todos los grandes partidos consiguen dinero más allá del Estado. A través de las cuotas de afiliados, préstamos, créditos, herencias y donaciones, las formaciones intentan mejorar sus balances.
También suman los beneficios que puedan generar por gestionar su propio patrimonio, como arrendar sedes o hacer negocio con ellas para todo tipo de eventos. También los que acarrea la promoción comercial de algunos productos. En el PSOE, el año pasado, se desató la 'perrosanxemanía' con la venta de camisetas (4,99 euros) y chapas (2 euros) con el eslogan de marras. Pero por lo que se desprende de la deuda del PSOE con los bancos, el partido tendrá que vender muchas camisetas y chapas para quitársela.
nataliany
Sánchez, no existiría de no ser por la conveniencia de éso que llaman "poderes fácticos" .
Fernandoo
¿qué banco le financia al 0%? Yo también quiero apuntarme.
Tora
En cualquier caso el desbarajuste es total. Si han ido a las Fuerzas Armadas supongo que eso aparecerá en alguna parte. No es normal que se explique después de no sé cuantos días. Es como si las vacunas que han ido a tal o cual comunidad desparecieran sin más y no figurara su destinatario en ningún sitio.