La candidatura de la exministra de Vivienda socialista Beatriz Corredor a la alcaldía de Madrid se complica por el caso de presunta financiación irregular del PSPV, tras la imputación de Marcos Vaquer, subsecretario y presidente la entidad pública del suelo Sepes en su etapa, y la de Nicolás Mateos, exjefe de Gabinete de Corredor y ex asesor de Urbanismo en el Grupo Socialista del Ayuntamiento de Madrid.
Aunque la Ejecutiva Federal del PSOE todavía no ha designado candidatos, el nombre de Corredor figura en todas las quinielas internas del PSM como favorita para presentarse a las primarias y, de hecho, Pedro Sánchez no ha desmentido en los últimos meses el alud de informaciones que la mencionan como cartel electoral.
Y su problema es que, además de Vaquer y Mateos, la jueza de Instrucción Número 24 de Madrid también ha citado como imputadas a otros siete cargos de confianza de la ex ministra: Eva Cuesta, directora de Comunicación del Ministerio durante la etapa de Corredor -de abril de 2008 a octubre de 2010-, Eva Santiago, Irene Domínguez, Beatriz Tejada, Pedro Plasencia, Rita Lorite y Andrés Lara.
Un contrato de 126.208 euros adjudicado en 24 horas de forma irregular, según la Intervención del Estado, clave en la imputación del equipo del Ministerio de Vivienda
La clave de la imputación de todos ellos figura en un informe de la Intervención General del Estado (IGE) -pedido por la jueza- en el que se señala que, como Mesa de Contratación del Ministerio de Vivienda en 2009, adjudicaron en tan solo 24 horas un contrato por valor de 126.208 euros para la promoción de Plan de vivienda 2009-2012. Dice el informe de la IGE, literalmente, que la cronología de la tramitación "resulta incoherente" e "imposible".
Tanto la jueza del 24 de Instrucción de Madrid, como la del 21 de Valencia, investigan una trama de adjudicación de contratos por parte del Ministerio de Vivienda a la empresa de Comunicación y Marketing Crespo Gomar, eje de la trama de financiación irregular del PSPV y del Bloc.
Si finalmente la imputación de los que fueron todos sus cargos prospera, sería un duro palo para Beatriz Corredor pero también para Sánchez y la Ejecutiva Federal, muchos de cuyos integrantes daban por hecho que la exministra sería el cartel electoral en la capital de España porque Sánchez quiere a una mujer para compartir con la alcaldesa, Manuela Carmena.
Tras el 'no' de Cristina Narbona y de Margarita Robles, la exministra de Vivienda es la única candidata de peso que le quedaba a Sánchez para la alcaldía de la capital
A diferencia de la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, a quien Sánchez propuso ser candidata y lo rechazó, o de la portavoz del Grupo Socialista, Margarita Robles, a quien no llegó a proponérselo en firme porque ella dejó claro ante los primeros globo-sonda que no aceptaría, Corredor sí se ha mostrado dispuesta a ser cartel electoral.
Las expectativas electorales para el Ayuntamiento "no son las mejores" y eso ha echado para atrás a otras candidatables, por temor a que el PSOE quede cuarta fuerza en el consistorio madrileño.
