Política

Sánchez se alinea con Ayuso y frena los confinamientos domiciliarios tras el 9-N

El Gobierno aparca un nuevo decreto que endurezca las actuales restricciones para frenar el coronavirus y asegura que de haber confinamientos serían selectivos y no en todo el territorio 

  • Sánchez se alinea con Ayuso y frena los confinamientos domiciliarios tras el 9-N

No habrá confinamiento domiciliario a corto plazo. El Gobierno ha frenado el endurecimiento de las actuales restricciones para atajar la segunda ola del coronavirus. Fuentes del Ejecutivo aseguran que no hay un consenso entre las comunidades autónomas para aplicar esta medida después del 9 de noviembre. Y en la línea de lo que defiende la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, señala que los confinamientos, de haberlos, serían selectivos y no en todo el territorio.

La vicepresidenta Carmen Calvo ha situado el 9 de noviembre como una fecha clave para evaluar el resultado de las medidas del actual estado de alarma. Calvo, ni nadie del Gobierno, ha descartado aplicar un confinamiento domiciliario similar al que ya se ha puesto en marcha en países como el Reino Unido y Francia. Sin embargo, ha pedido paciencia tras las peticiones de algunas comunidades como Asturias.  

"Vamos a intentar que eso no llegue. Vamos a ser como siempre contundentes y prudentes al mismo tiempo", ha dicho la vicepresidenta.

Gobierno: "No hay nada en marcha"

Las palabras de Calvo han generado dudas sobre los planes del Ministerio de Sanidad a corto plazo. Pero fuentes del Gobierno afirman a Vozpópuli que no se está trabajando en confinamiento domiciliario para los próximos días. "No hay nada en marcha", dicen estas fuentes. 

El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha insistido en dar un margen al estado de alarma actualmente en vigor para analizar su evolución. Sanidad ha notificado 5.114 contagios y 238 muertos en las últimas 24 horas. El total de fallecidos en España por el nuevo virus supera ya las 36.500 personas. 

Además de la paciencia, no existe un consenso en las comunidades autónomas sobre esta medida tan drástica. El estado de alarma en vigor permite a las autonomías confinar perimetralmente municipios, cerrar bares y podrán gestionar el toque de queda a partir de la semana que viene. El Consejo Interterritorial se reúne el miércoles y solo Asturias se ha mostrado abiertamente favorable al confinamiento domiciliario. Cataluña, que lo hizo la semana pasada, se ha desdicho este martes. Y ninguna otra región defiende ahora mismo un encierro similar al de la primavera.

La lectura de La Moncloa es la misma que ha hecho Ayuso. Se trata de una coincidencia política inédita en los últimos tiempos. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha asegurado que el confinamiento domiciliario tiene que ser la "última opción". Y ha reclamado soluciones intermedias. "No somos partidarios de abrir-cerrar-cerrar", dicen desde la Comunidad.

Confinamiento por municipios

El Gobierno admite que un confinamiento domiciliario requerirá un nuevo decreto y una nueva convalidación parlamentaria. Sería una medida nacional, pero no de obligado cumplimiento para todo el país. Es decir, se podría ordenar confinamientos selectivos según la situación de la pandemia.

"Podría ser para unos sitios sí y para otros no, según su situación epidemiológica", dicen fuentes del Ejecutivo. Estas fuentes aseguran que los disturbios violentos de este pasado fin de semana no han influido en este compás de espera. Calvo ha instado a la "responsabilidad y la solidaridad" con todos los españoles que están en la UCI" y con el "personal sanitario" que mantiene "día a día a la población".

"No podemos tener a gente activando las mayores irresponsabilidades, los peores sentimientos. No nos gusta que los radicales y violentos vayan a aprovechar un hueco de tensión. Pedimos a toda la clase política su condena y comportamiento ejemplar", ha asegurado.  

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