El comisario jubilado José Manuel Villarejo, el presunto cabecilla de lo que la Fiscalía Anticorrupción califica "un clan policial mafioso", realizó en 2005 rastreos por encargo del jefe de seguridad del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), Julio Corrochano, al abogado Jaime Queipo de Llano, según consta en una conversación entre el propio Villarejo y su compañero, el también comisario Enrique García Castaño, que fue grabada el 15 de mayo de 2005, y que consta en la Audiencia Nacional.
En el mismo audio, Villarejo justifica los rastreos de los teléfonos móviles a petición de BBVA, después de que la entidad financiera le pagara la cantidad convenida todos los meses. Y porque el abogado Queipo de Llano había sido crítico con la cúpula del banco en una reciente junta de accionistas.
En esas fechas, en 2005, el presidente ejecutivo del banco era Francisco González, conocido popularmente con las siglas "FG", y que ahora se enfrenta a una investigación en la Audiencia Nacional en la pieza separada denominada 'Trampa' por los presuntos pagos irregulares a Villarejo.
"La verdad es que hay dos o tres tíos", explica Villarejo sobre los rastreos, para después aludir a una de sus víctimas: "El Queipo y el otro, para ver qué hacen, pero no hacen nada", concluye el excomisario.
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"El Queipo al final es un mercenario", continúa Villarejo, que sigue informando a García Castaño del resultado de sus pesquisas: "Por lo que he visto es un abogado, que no es nieto precisamente del Queipo de Llano [en alusión al dictador], que tiene contacto con dos o tres antiguos colegas: uno el amiguete de ese con el que comimos, Isidro", completa el excomisario jubilado a García Castaño, quién según la conversación era el encargado de facilitar los rastreos de los teléfonos a su compañero. Para ello, siempre según las grabaciones, 'El Gordo' recurría a sus "amiguetes" de la Policía.
¿Para quién trabaja?
Y Villarejo le explica en ese momento a García Castaño, conocido con el alias de 'El Gordo', el motivo por el que hacía en concreto los seguimientos el abogado Queipo de Llano: "Lo único es que el tipo, de pronto, compró el mínimo de acciones para poder dar por culo, que es un millón de pelas [6.000 euros], y en la junta [de accionistas del banco] se dedicó a dar por culo", relata el excomisario, que lanza entonces una pregunta que muestra claramente el objetivo de sus pesquisas: "¿Entonces, este tío para quién trabaja?".
Villarejo, quién reconoce después abiertamente a su interlocutor en la conversación que el abogado Queipo de Llano "es un tío" que había "rastreado", sostiene que este letrado "se dedica fundamentalmente a liquidar empresas y sociedades", así como "al manejo y compra de sociedades".
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Según la investigación conjunta desarrollada por los diarios Moncloa.com y El Confidencial, Jaime Queipo de Llano fue una de las personas cuyos teléfonos móviles fueron espiados por Villarejo y su clan policial.
'Vozpópuli' se ha puesto en contacto con este bufete de abogados, cuyos responsables han rechazado hacer declaraciones en relación al espionaje, al mismo tiempo que han asegurado que ninguno de sus empleados han tenido nada que ver con el caso.
"Te doy lo del FG"
En otra grabación de 19 de mayo de 2005, cuatro días después de que Villarejo informara a 'El Gordo' de su investigación sobre el abogado hostil a Francisco González, el comisario García Castaño explica a su compañero que ya podía darle la información que le había pedido.
"Ahora te doy lo del BB, y lo del FG. Lo del FG también lo voy a sacar, lo que pasa es que lo del FG es canela que te cagas, macho", dice en concreto 'El Gordo', quien se queja de lo laborioso que era ese trabajo para BBVA, para finamente aludir a su contacto en el banco, el jefe de seguridad, Julio Corrochano: "No se da cuenta Julio".