Una entrevista de Esteban González Pons abre la caja de los truenos en Polonia. El vicepresidente de los Populares Europeos (PPE), punta de lanza de los esfuerzos del PPE por analizar las violaciones al Estado de derecho que presuntamente comete el Gobierno polaco, ha declarado que la misión de los populares europeos en Polonia -que él mismo dirige- busca ayudar a que el Ejecutivo de Mateusz Morawiecki sea derrotado en las urnas. Pons, que lidera la investigación del PPE contra el actual Gobierno polaco por el uso del software espía Pegasus, afirma en una entrevista que dicha misión "intentará ayudar a la sociedad polaca a cambiar a las autoridades, que no parecen ser buenas para Polonia".
La UE "tiene derecho a advertir a uno de sus miembros que tenga cuidado cuando infringe la normativa comunitaria. También puede castigarlo (...) por no cumplir las reglas comunitarias", señala Pons en una entrevista difundida por euractiv.pl. "Lo que está sucediendo en el foro de la Unión Europea en relación con las acciones de las autoridades polacas no está dirigido contra Polonia y su sociedad, (sucede) porque las autoridades locales violan las normas comunitarias", añade.
Tras difundirse la entrevista, Vox -entre cuyos aliados internacionales destaca el Gobierno de Morawiecki- ha tirado con bala contra el vicepresidente del Partido Popular Europeo y exige su dimisión inmediata. A ojos de la formación, Pons ha admitido que su objetivo como "jefe de la misión del Europarlamento es provocar un cambio de régimen en Polonia". "Cuando González Pons dice que va a Polonia a interferir en su política interna sabes que la UE va a la deriva", ha declarado el jefe de la delegación de Vox en el Parlamento Europeo, Jorge Buxadé. A sus críticas se ha sumado también el líder de Vox, Santiago Abascal.
Vox recibe a Orban y Morawiecki en Madrid
Las acusaciones de Vox llegan días antes de que Abascal ejerza de anfitrión en Madrid de sus socios europeos con motivo de una cumbre para la que ya han confirmado su presencia los primeros ministros de Hungría y de Polonia, Viktor Orbán y el propio Morawiecki. Abascal ya ha viajado en varias ocasiones a Polonia y Hungría, con cuyos gobiernos comparte la necesidad de "proteger las fronteras", fomentar las políticas de natalidad y familia y la defensa de "las naciones soberanas".
En su último viaje a Varsovia en diciembre, Abascal ya anunció que líderes conservadores de otros países habían aceptado su invitación para que la siguiente cumbre tuviera lugar en Madrid este mes de enero. Finalmente, la cumbre se celebrará el viernes 28 y el sábado 29, según han confirmado fuentes de Vox.