La titular del Juzgado de Instrucción número 39 de Madrid, Belén Sánchez, ha dictado una orden de alejamiento que prohíbe al excomisario José Manuel Villarejo acercarse a menos de 500 metros de la doctora Elisa Pinto, quien reconoció a este veterano policía como el responsable del apuñalamiento que sufrió en la calle el 10 de abril de 2014.
La defensa de Villarejo ha remitido al Juzgado un escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que recurre la orden de alejamiento, mostrando su "total y rotundo desacuerdo" con el fallo de la magistrada. La Fiscalía también se ha opuesto a la adopción de esta medida al entender que no existen indicios suficientes.
La juez citó ayer a Elisa Pinto y a la Villarejo a pesar de que en el auto de imputación del excomisario se fijó el día 29 de junio como el de la comparecencia. La imputación de Villarejo se acordó después de que la Audiencia Provincial de Madrid anulara en abril la decisión de la propia magistrada de archivar la causa en la que Elisa Pinto denunciaba al empresario Javier López Madrid por acoso. Tras varias suspensiones, la rueda de reconocimiento se celebró el pasado 6 de junio.
La defensa del comisario jubilado (que también está imputado en el marco de la investigación por la grabación en octubre de 2014 a agentes de la Policía y del CNI a cargo de las diligencias de Francisco Nicolás Gómez Iglesias, el 'pequeño Nicolás') ha basado su recurso en que la propia dermatóloga identificó a Villarejo "antes incluso de la rueda de reconocimiento", lo que califican de "algo realmente extraordinario".
"Especialmente", alega el letrado, "si se tiene en cuenta que, en el primer atestado tras la supuesta agresión, la doctora Pinto declaró ante la Policía que la atendió a pie de calle que el agresor era un hombre de 45 años, pelo canoso y que huyó rápidamente del lugar de los hechos". "En abril de 2014, don José Villarejo contaba con 63 años y acababa de ser intervenido de una lesión grave en la espalda que le impedía la celeridad y le dificultaba la movilidad", subraya.
La médico había denunciado al empresario asegurando que, tras una visita a su consulta, "comenzó un flirteo que ella trató de parar pero no pudo". Elisa Pinto asegura que Villarejo le agredió y amenazó con el siguiente mensaje: "López Madrid quiere que cierres la boca". La versión de López Madrid es que fue la doctora quien lo acosó a él y a su familia.
En 2015 Elisa Pinto señaló en comisaría por primera vez la foto de Villarejo como la persona que le apuñaló en la calle un año antes. La defensa del policía jubilado, que se definía a sí mismo como "agente encubierto", aseguró en un comunicado tras la rueda de reconocimiento del 6 de junio que existen elementos probatorios tanto de la Guardia Civil como de la Policía que ponen "en seria duda" su identificación.
También señalaba la defensa del expolicía que existen testigos que ponen en duda la veracidad de la identificación, situando a Villarejo en otro lugar totalmente distinto al de la supuesta agresión. La juez ya ha tomado declaración, entre otros, a los policías que la atendieron en la comisaría de Chamartín cuando la doctora interpuso una primera denuncia, en enero de 2014, al ser agredida con un objeto punzante.
Pinto acusó a López Madrid de seguirle y mandarle fotografías de los lugares en los que había estado, así como de presentarse en un hotel de París al que ella había acudido por motivos profesionales. También de presentarse en su consulta sin cita previa, en una ocasión acompañado de un hombre que, según la denunciante, se trataría de Villarejo, y según el denunciado, su abogado Rafael Redondo.
López Madrid mantiene que fue Pinto quien le acosó a él y a su familia, y que recibieron llamadas de contenido sexual y mensajes amenazantes, hechos por los que denunció a la doctora en un procedimiento que instruye el Juzgado 26 de Madrid.