La bomba estalló pasadas las 9 de la noche de ayer. Ignacio López del Hierro, marido de María Dolores de Cospedal, secretaria general del PP y presidenta de la Comunidad de Castilla-La Mancha, hacía pública su renuncia a ocupar un puesto en el Consejo de Administración de Red Eléctrica de España (REE) “para no perjudicar a su esposa” y en vista de la “utilización y politización” producida una vez conocido su nombramiento, a mediodía de ayer. Fuentes de toda solvencia consultadas por este diario han asegurado que la renuncia es consecuencia de una “decisión personal” del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en tal sentido, tras el “profundo malestar” causado en el entorno de Moncloa por esa nominación.
A primera hora de la tarde se supo que López del Hierro había sido nombrado consejero de REE, sujeto a ratificación en la Junta General de Accionistas del próximo 19 de abril. La noticia causó conmoción y los comentarios surgieron a raudales en todos los ámbitos sociales. El nombramiento era una decisión personal de Ramón Aguirre, flamante presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales, SEPI (propietaria del 20% del capital de REE), e íntimo de López del Hierro. Testigos presenciales aseguran que durante los dos días que duró el reciente Congreso del Partido Popular celebrado en Sevilla, ambos “no se separaron ni un minuto; siempre juntos”.
El nombramiento, por eso, no sorprendió a los enterados del PP, aunque no pocos de ellos se preguntaban si el episodio era conocido por el Presidente Rajoy, que en más de una ocasión ha expresado su “preocupación por las ocupaciones” del marido de la secretaria general del partido. Según fuentes consultadas por este diario, cuando a José Folgado, ex secretario de Estado de Presupuestos, primero, y de Economía, después, con José María Aznar y alcalde de la localidad madrileña de Tres Cantos hasta el pasado jueves 8 de marzo, y ahora presidente de REE, Aguirre, su jefe natural, le anunció la entrada en el consejo de Lopez del Hierro, el de Zamora exclamó con laconismo digno de mejor causa: “no me gusta…”
Recién llegado a REE, pieza fundamental del sistema eléctrico español, Folgado no tenía, sin embargo, fuerza ninguna para oponerse a la aparente alcaldada. Parece que dijo también a sus allegados que “no quería líos”, referencia expresa al temor de que la controvertida llegada del “marido de la Cospe”, como popularmente se conoce a López del Hierro, alterase el día a día en la empresa.
Las redes sociales echaron literalmente humo durante la tarde de ayer. Ocurre que López del Hierro, que con el de REE hubiera sumado cuatro puestos en otros tantos consejos -Renta Corporación, Amper e Itínere-, se iba a embolsar entre 130.000 y 180.000 euros brutos al año por asistir a 12 reuniones del consejo, una por mes, cantidad que hubiera podido incrementarse de haber quedado adscrito a alguna de las Comisiones del Consejo, la de Retribuciones y/o la de Buen Gobierno.
El Consejo mejor retribuido de todo el sector público
Conviene aclarar que el Consejo de REE –compuesto por 11 afortunados- es el mejor retribuido de todo el parque de empresas públicas, lo que explica que se produzcan codazos cuando se trata de cambiar el Consejo, lo que suele suceder, como en el XIX, cuando un partido gana las generales y manda a casa a los del partido perdedor. Así, el socialista Luis Atienza, presidente de REE hasta la llegada del PP al Poder, ganaba la nada despreciable suma de 600.000 euros, algo así como 100 millones de las antiguas pesetas, que es la cantidad, cabe imaginar, que ahora se embolsará Pepe Folgado.
Con el dimisionario López del Hierro también fueron nombrados ayer consejeros de REE Alberto Nadal, responsable de Asuntos Económicos, Laborales e Internacionales de la CEOE (y hermano, además, de Álvaro Nadal, jefe de la oficina económica de Moncloa y asesor de Rajoy), y el venerable Juan Iranzo, decano del Colegio de Economistas de Madrid y vicepresidente del Instituto de Estudios Económicos, un think tank próximo al PP. Los tres llegaban con la vitola de consejeros “independientes” de la eléctrica, lo que no deja de tener su gracia. Finalmente, Alberto Nadal decidió renunciar al puesto por "la interpretación que dicho nombramiento ha tenido en los medios". A ellos se sumarán otros tres consejeros dominicales en representación de la Sepi y del Estado.
López del Hierro, economista, con una dilatada experiencia en el mundo del ladrillo como ex consejero de Metrovacesa y ex vicepresidente de la inmobiliaria Bami, ya resultó políticamente empitonado a resultas de su nombramiento como consejero de la Corporación Industrial de Caja Castilla-La Mancha, la entidad que tuvo que ser intervenida por el Banco de España en medio del escándalo, episodio que costó no pocos disgustos a la señora Cospedal, que llegó a temer que el desliz le costara las elecciones en la Comunidad castellano-manchega.
Según las fuentes, López del Hierro estuvo a punto días atrás de ser nombrado representante del Estado español en el consejo de administración de EADS, el gigante aeronáutico propietario de Airbus, nominación que finalmente recayó en Josep Piqué, presidente de Vueling y ex ministro de José María Aznar. Ayer no eran pocos los que, en el entorno de La Moncloa, torcían el gesto al ser preguntados por la lotería del “marido de la Cospe”, cuando parecía lógico pensar que el presidente Rajoy estaba al tanto de la cuestión. Al parecer, no lo estaba. “Quien tenía que saberlo, no lo sabía”, aseguran.
