Tras el frente de la reforma laboral y las tensas reuniones con Fátima Bañez, ministra de Trabajo, el presidente de la CEOE, Juan Rosell, seguirá su ronda de reuniones con ministros. La cita es hoy a las 17.00h, en el ministerio de Industria, donde se sentará por primera vez con José Manuel Soria, según fuentes de la patronal de los empresarios. 

El objetivo de Rosell es mantener un primer encuentro para conocer a grandes rasgos los planes a corto plazo del Gobierno en materia de energía, telecomunicaciones y turismo, y para transmitirles las princiaples preocupaciones. 

En el tema energético, Rosell se centrará en la guerra entre nucleares y solares, que se va poco a poco tensando de nuevo. Aunque el Gobierno no ha hecho grandes anuncios en esta materia, la idea que baraja es reducir los costes del sistema. El lobby nuclear (Iberdrola y Endesa) apuestapor el recorte de las primas a la energía solar (sobre todo la termosolar de Abengoa, ACS y Acciona); y los solares apuestan por aplicar una tasa extra a la generación de la energía nuclear y a la hidráulica.

Rosell siempre ha defendido el papel de la energía nuclear. Pero lo que ahora se cuestiona en el sector no es su permanencia (que está más que grantizada), sino los cambios sobre el precio de generación de este tipo de energía y las consecuencias que puedan tener sobre los consumidores (recibo) y sobre la industria (ingresos). Y precisamente, Soria insistió ayer en la necesidad de revisar la regulación para que la energía nuclear que se produce no salga tan cara y propone un replanteamiento del modelo del mercado mayorista o pool.

"¿Qué sentido tiene que infrautilicemos este tipo de energía de coste bajo, si luego sale un precio elevado? Tiene que ser objeto de un cambio en el modelo de regulación para que el precio remunerado de cada energía sea aquel que suponga el coste más la remuneración de la empresa".

Sólo durante el año 2010, el coste total del sistema eléctrico español ascendió a 30.921 millones de euros. De esta cantidad, un 35% (10.719 millones de euros) correspondió a costes externos del sistema, compuestos fundamentalmente por las primas a las renovables, derivadas de decisiones políticas.

En cuanto a las renovables, Soria es partidario de mantener todas las tecnologías, pero abrió la puerta a una revisión de las primas, "que están ahí y son recursos públicos". El anterior ministro de Industria permitió la construcción de 40 plantas termosolares de 50 MW. Con unas 3.000 horas de funcionamiento al año y una retribución de 300 euros por MWh, la factura ascendería a 2.000 millones de euros anuales.

En turismo, Soria prevé una rebaja del IVA para el sector turístico sería una "medida buena", aunque debido a la situación actual, considera que "no es el mejor momento", por lo que volverá a proponerla "cuando la economía española mejore".

Sobre la posible privatización de Paradores, Soria destacó ayer que la cadena pública hotelera "es uno de los productos de referencia de la oferta española que funciona bien", aunque considera que "podría mejorarse su gestión a través de fórmulas público-privadas".