España

Sánchez confía sus opciones el 9-J al empuje de Vox y al posible “empate” con el PP

En el cuartel general de los socialistas se cree, además, que la abstención prevista, superior al 50%, dinamitará el “plebiscito” que pretende Feijóo

  • Pedro Sánchez aparece con una herida en el brazo de gran tamaño en un mitin al que ha ido con Begoña Gómez -

Pedro Sánchez ya no descarta algo que juzgaba impensable hace un mes, empatar con el PP las elecciones europeas, incluso ganarlas, si se produce esta tormenta perfecta: una división “clara” del voto de la derecha entre el PP y un Vox sorprendentemente pujante en los últimos sondeos, mientras el PSOE se come a Sumar; todo ello en un contexto de baja participación final porque la mayoría de las encuestas pronostica que la mitad del electorado español o más se quedará en casa este domingo.

Esa alta abstención, primero, torpedearía el carácter “plebiscitario” de estos comicios sobre la figura de Sánchez que quiere Alberto Núñez Feijóo, quien este jueves desataba cierta euforia en el cuartel general de los socialistas cuando le oyeron tocar a rebato entre los suyos para evitar el temido “empate” de los dos grandes partidos.

Tanto en La Moncloa como en Ferraz consideran que la sola mención al empate por parte de quien hasta hace dos meses era favorito en los sondeos, hasta por seis puntos de distancia, es “un error de bulto” fruto de “los nervios” de última hora del que más se juega en el envite; favorece sin pretenderlo, dicen, el marco del PSOE: transmitir al abstencionista de izquierda que si vota este domingo socialista -no a Sumar o a Podemos- tiene al alcance de la mano derrotar a la “coalición de ultraderecha” que forman PP y Vox.

La campaña -el partido, en términos futbolísticos- ha acabado donde pretendían el PSOE y Pedro Sánchez al inicio de la misma,:con el PP de más a menos y ‘pidiendo la hora’ al árbitro, como ya le ocurrió a Feijóo en las elecciones generales de hace un años, y ellos de menos a más a la espera de que se abran las urnas este domingo.

La campaña -el partido, en términos futbolísticos-, dicen los socialistas, ha acabado donde ellos querían al inicio de la misma: con el PP de más a menos y pidiendo la hora al árbitro, como ya le ocurrió a Feijóo en las elecciones generales de 2023, y ellos de menos a más a la espera de que se abran las urnas este domingo.

A la espera de que se abran las urnas, el PSOE tiene razones para cierto optimismo porque la diferencia con el PP en el barómetro que está realizado la Unión Europea en los 27 países -400 entrevistas diarias en cada uno de ellos- era el sábado uno de junio de 4,6% (34,2% de voto para los populares/29,6% para los socialistas), pero éste viernes, último día de tracking, ya se había reducido al 2,8% (34% para el PP/31,2% para el PSOE).

European Tracking Spain by Vozpópuli

Y, lo más alarmante para el cuartel general de los populares: Vox sigue disparado en intención de voto al cierre de campaña. Según ese sondeo, que corroboran otros de distintas firmas demoscópicas españolas, el sábado uno de junio los de Santiago Abascal estaban en 11,1% de voto y este viernes ya estaban en el 12%.

Si a eso se une otro factor fundamental en el que coinciden tanto fuentes populares como socialistas consultadas por Vozpópuli, que la participación no llegará “ni de lejos” al 57,8% del electorado que pronostica el trabajo encargado por la UE, el panorama se torna complicado para quien va favorito.

Aunque la reaparición de su pareja, Begoña Gómez en un mitin en Benalmádena (Málaga) haya sido criticada duramente en distintos ámbitos socialistas por “arrastrar la sigla” tras su imputación por el juez Peinado, Pedro Sánchez está “convencido” de que tiene el empate con Feijóo, si no la victoria, al alcance de la mano.

Es decir, esa diferencia del 3,4% a favor del PP podría ser menor y acercarse al empate, lo que busca Sánchez con un arreón a última hora de su votante. Algo que ha llevado a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, a señalar en público lo que otros barones dicen en privado: “No demos las elecciones por ganadas”.

De hecho, y aunque la reaparición de su pareja, Begoña Gómez en un mitin en Benalmádena (Málaga) haya sido criticada duramente en distintos ámbitos socialistas por “arrastrar la sigla” tras su imputación por el juez Juan Carlos Peinado, el presidente del Gobierno está “convencido”, señalan en su entorno, de que tiene el empate con Feijóo, si no la victoria, al alcance de la mano.

Vídeos PP contra el “empate”

”A nosotros nos vale ese empate, incluso aunque quedemos ligeramente por debajo del PP; a Feijóo no”, señala un alto cargo ministerial. En el cuartel general de Génova cruzan los dedos para que todo sea un espejismo de última hora y al PSOE le pasen factura la Ley de Amnistía y la llamada a Begoña Gómez a declarar ante el juez por “tráfico de influencias” y “corrupción”, pero no las tienen todas consigo.

Por eso no sólo la llamada de Alberto Núñez Feijóo en los mítines a no confiarse y acudir a votar como si fueran unas elecciones generales “porque nos jugamos mucho”; también los vídeos emitidos por los populares en las últimas horas hacen hincapié en el riesgo que supondría ese empate con Sánchez, no digamos la victoria que ansía el inquilino de La Moncloa.

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