El Partido Popular (PP) ha hecho valer su mayoría absoluta en el Senado para exigir, junto a Vox, que el Gobierno cese de forma "inmediata" a Álvaro García Ortiz como fiscal general del Estado, investigado por una presunta revelación de secretos.
El debate de la moción, presentada por el grupo popular, se ha producido en medio de acusaciones de corrupción entre el PP y el PSOE, mientras que otros grupos minoritarios han lamentado este "permanente cruce de ataques" entre los dos principales partidos de la Cámara Alta.
Los populares han pedido "coherencia" al Gobierno con su objetivo regeneración democrática y "que se asuman de manera inmediata todas las responsabilidades políticas" de las investigaciones del 'caso Koldo', el fiscal general o Begoña Gómez.
En concreto, se ha pedido al Ejecutivo que cese de forma "inmediata" a Álvaro García Ortiz si él no dimite por esa investigación en relación a la causa por presunto fraude fiscal de la pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso.
Además, el PP ha afeado a los socios del PSOE su "doble vara de medir" con la corrupción, ya que, según ha argumentado, si los populares estuvieran gobernando en esta situación "estaría Moncloa lleno de tiendas de campaña, el Congreso rodeado diciendo no nos representan" y habría "escraches" diarios. En este mismo sentido se ha pronunciado la portavoz de Vox Paloma Gómez, que ha tratado de enmendar el texto sin éxito, y que ha asegurado que el Gobierno de Pedro Sánchez no podría continuar en una democracia "donde los contrapoderes cumplen sus funciones".
La respuesta de Oleaga a la propuesta del Senado
Por su parte, el senador del PSOE Txema Oleaga ha acusado al PP de estar "persiguiendo al fiscal general del Estado en una cacería absolutamente intolerable" por haber investigado el desastre del Prestige, entre otras cuestiones. "El odio es desde entonces lo que les lleva a ustedes a perseguir a esta persona", ha advertido.
Oleaga ha recordado que es el PP "el único partido condenado por corrupción" y ha ironizado con la negativa de Ayuso a no acudir a la reunión con el presidente, porque "en el caso de haber ido hubiera vuelto el tufo de la corrupción que desapareció con Mariano Rajoy con los sobresueldos en B".