Nada voy a hacer / Rebuscando en las heridas del pasado... El cantante colombiano Carlos Vives entona el arranque de La Bicicleta, el sencillo que hace tres veranos sonaba en bucle en todas las estaciones de radio. Pasado el estribillo, se suma Shakira. Ambos componen, cantan y bailan la canción. Ahora, ambos testificarán ante el Juzgado de lo Mercantil número 12 de Madrid por la demanda de plagio presentada por MDRB Music Publishing. Él lo hará este jueves; ella, este miércoles.
Al rebuscar en las heridas del pasado afloran las otras ocasiones en los que la cantautora ha tenido que defenderse de acusaciones como esta. Esta vez es el compositor y productor cubano Livam y su editora Maryla Dianik Romeu (MDRB Music Publishing) quienes han presentado la demanda. Lo hicieron en enero de 2017 y el juzgado madrileño antes señalado la admitió a trámite en marzo de ese mismo año.
Además de señalar a la colombiana, se acusa a Sony Music Publishing Latina, Andrés Eduardo Castro, el ya mencionado Carlos Vives y otras nueve productoras. Según Livam, éstos habrían utilizado un fragmento de su canción Yo te quiero tanto (1997) y lo habrían reproducido sin su autorización.
No voy a perder / Yo no quiero ser un tipo de otro lado. Aunque aún no se ha celebrado el juicio y, por tanto, tampoco se ha dictado sentencia ni a favor ni en contra, la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) ya suspendió a los cantantes de los derechos de autor de la canción. Según han informado a Europa Press fuentes del organismo, la decisión da cumplimiento al reglamento interno y se mantendrá hasta que la Justicia falle sentencia.
En el estribillo en cuestión se escucha a Shakira y Vives cantar "que te sueño y te quiero tanto"; mientras que Livam entona "yo te quiero, yo te quiero tanto". La Justicia madrileña estudiará el caso.
'Hips Don't Lie' y 'Waka waka'
Otras dos canciones han llevado a Shakira al centro de la polémica al ser acusada de plagio: Hips Don't Lie (Las caderas no mienten, 2005) y el Waka Waka del Mundial de Fútbol de 2010. Ninguno de los dos casos se han discutido ante la Justicia.
En 2005, el cantante de salsa Jerry Rivera criticó a la barranquillera por utilizar las trompetas que dan inicio a su canción Amores como el nuestro (1992). Aunque la acusación tuvo gran repercusión mediática, el puertorriqueño finalmente decidió no llevar el caso a los juzgados.
Cinco años después de aquella controversia con Rivera, Shakira fue señalada nuevamente por un presunto plagio. Esa vez el que cargó contra la compositora fue Wilfrido Vargas, quien amenazó con demandar a la cantante por aquella canción que abanderó el Mundial de Sudáfrica 2010 y que llevaba por estribillo el "waka, waka, eh, eh".
El músico dominicano ya había usado el compendio de palabras africanas en su canción El negro no puede (1982), interpretada por el grupo femenino Las chicas del can. El pleito no llegó a los juzgados y la FIFA llegó a señalar que el estaba basado en una canción floklórica de Camerún.
Pleitos con Hacienda
La polémica con la artista de Barranquilla va más allá de su música. Sus cuentas también la llevarán a los juzgados este año. El próximo 12 de junio volverá a declarar. Lo hará como investigada por seis presuntos delitos contra la Hacienda pública, según acordó el pasado febrero el juez que investiga la querella de la Fiscalía.
El ministerio público le acusa de un supuesto fraude de más de 14,5 millones de euros en IRPF e Impuesto de Patrimonio (IP) a través de 14 sociedades en países como Islas Caimán, Islas Vírgenes Británicas y Panamá. En concreto, considera que la colombiana dejó de presentar la liquidación del ambos impuestos durante los ejercicios de 2012, 2013 y 2014, lo que derivó en un perjuicio económico a Hacienda de 12,3 millones de euros por IRPF y 2,1 millones por IP.
La fiscal sostiene que Shakira vivía en España durante dichos ejercicios y que sus estancias en el extranjero eran "esporádicas", por lo que tenía la obligación de tributar como residente fiscal. Por ahora, solo tendrá que explicar el "que te sueño y que te quiero tanto".
Óyeme, Carlos, llévame en tu bicicleta / Que si a mi Pique tú le muestras el Tayrona / Después no querrá irse pa' Barcelona.