Los hombres que el 22 de febrero asaltaron la Embajada de Corea del Norte en Madrid se identificaron como miembros de una asociación de derechos humanos para la liberación de Corea del Norte. Según ha podido confirmar Vozpópuli, el presunto cabecilla de esta operación, Adrián Hong Chang, fundó la organización Liberty in North Korea y participó en un programa sobre derechos humanos en el país asiático "financiado por el Departamento de Estado de Estados Unidos" entre 2006 y 2007.
Hong Chang, que ha sido identificado como el presunto cabecilla de la operación, huyó a Estados Unidos tras el asalto y acudió al FBI para facilitar información sobre lo sucedido en la sede diplomática en España, según detalla el magistrado titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, José de la Mata, en un auto emitido este martes. Actualmente, recae una orden de detención internacional sobre el ciudadano mexicano.
Este medio ha contactado con la oficina central en Washington de Freedom House, la organización a cargo del programa en el que participó Liberty in North Korea. Desde la ONG han confirmado de que la asociación de Hong Chang formó parte del programa, pero han negado cualquier vínculo con el presunto líder del asalto a la Embajada norcoreana en España: "No tenemos constancia de que haya sido empleado de Freedom House y no hemos tenido interacción con él o su organización desde entonces".
Como parte del programa financiado por la Administración de George W. Bush, Hong Chang asistió al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en 2007. Según el diario de sesiones de la ONU, el presunto cabecilla del asalto participó en una sesión del Consejo celebrada el 30 de marzo de 2007 en la sede de Nueva York. De aquel encuentro, se emitió la resolución 4/4, en la que el organismo exhortó a los Estados miembro a cumplir los Objetivos de Desarrollo del Milenio; también invitó a acordar un programa de trabajo que impulsara el derecho al desarrollo "al mismo nivel y a la par con todos los demás derechos humanos y libertades fundamentales".
Hong Chang, que también recurre al alias Oswaldo Trump, formó parte de la delegación de ocho personas del programa sobre derechos humanos que participaron con Freedom House. "Fundada en 1941, Freedom House fue la primera organización estadounidense en defender el avance de la libertad a nivel mundial", se lee en la página web del ente. "También empoderamos a los defensores de los derechos humanos y activistas cívicos de primera línea para defender los derechos fundamentales y promover el cambio democrático", añaden.
"Estados Unidos no tiene nada que ver"
El auto emitido este martes ha llegado hasta la Casa Blanca. El portavoz del Departamento de Estado de estadounidense, Robert Palladino, ha negado cualquier injerencia del gobierno de Donald Trump en el caso. "Estados Unidos no tiene nada que ver en esto", ha subrayado en rueda de prensa.
Ante las preguntas sobre si Washington estaba vinculada con el asalto a la sede norcoreana en Madrid, Palladino se ha limitado a responder que los detalles de lo sucedido en la calle Darío Aparicio número 43 (Madrid) está siendo investigado por las autoridades españolas.
"Para cualquier detalle sobre su investigación tendría que remitirlo a las autoridades españolas", ha dicho a los periodistas después de que se diera a conocer que Hong Chang mantuvo una presunta comunicación con el FBI tras el asalto a la Embajada de Corea del Norte.
Este martes, el Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional ha levantado el secreto decretado sobre la investigación. Además desvelar los detalles del asalto, el magistrado titular detalla los delitos que se le imputan a los presuntos autores: allanamiento de morada, detenciones ilegales, lesiones, falsificación documental, amenazas y robo, cometidos por organización criminal. Asimismo, ha emitido varias órdenes de detención internacional contra el grupo criminal.