Hace unas semanas el “no es no” de Manuela Carmena a presentarse como candidata a las próximas elecciones municipales pasó a ser “no, pero quizá sí”. Personas cercanas a la alcaldesa han extendido la siguiente teoría: Manuela Carmena se lo pasa bien y cree en lo que hace, pero sabe que con este equipo no va a ningún sitio y que el electorado no respaldaría una opción con los actuales concejales.
Si se presenta a las próximas elecciones, lo hará como independiente en una coalición como Ahora Madrid (o similar), pero nunca en un partido, y además elegirá a los concejales para que no ocurra lo que está sucediendo desde el principio de legislatura.
Esta teoría señala que Carmena cree que hay personas muy valiosas entre sus ediles para hacer oposición, pero no para gestionar un presupuesto como el que tiene el Ayuntamiento más importante de España.
El rumor de esta teoría ha provocado un auténtico terremoto en los grupos que conforman Ahora Madrid. Entre los concejales llegó a correrse el rumor de que un 80% de los candidatos para las próximas elecciones los elegiría la actual alcaldesa. Quedarían descartados los actuales ediles, muchos de los cuales han puesto en apuros a la alcaldesa en temas importantes para la ciudad.
La operación de los pisos del Cuartel de Artillería, el conflicto con Hacienda, la cooperativa de viviendas en las cocheras del Metro, la operación Madrid, ‘Nuevo Norte’, las peticiones de democracia en Venezuela,…
Alguna, ha comprado ya todos los billetes para no salir si repite Carmena. El Pleno del Ayuntamiento ha llegado a reprobar a una de sus concejales más polémicas, Rommy Arce, que gobierna sus juntas de distrito como no recuerdan ni en los tiempos más duros del PP. “Sus faltas de respeto y de democracia son constantes contra todo lo que no sea su opinión”, señala una representante de la oposición de uno de estos distritos.
Los conflictos internos son constantes con esta y con otros ediles. Algunos son conocidos y otros no. Personas que siguen la vida municipal afirman que Carmena se equivocó cuando dijo hace cerca de un año que no se presentaría a una próxima convocatoria electoral, lo que provocó que algunos no le hicieran ya mucho caso. Eso parece que ha cambiado.
El principal valor del Gobierno es la propia figura de la alcaldesa y que sin ella la nave se irían a pique
Otras fuentes cercanas a Podemos señalan que mantiene su liderazgo ante los ediles, que saben que el principal valor del Gobierno es la propia figura de la alcaldesa y que sin ella la nave se irían a pique.
El rumor de que la alcaldesa querría elegir a sus colaboradores, o que negociaría con Pablo Iglesias un 50/50, ha provocado muchos nervios en los ediles del Gobierno municipal.
Nueve de los actuales ediles de Carmena han firmado un documento en el que defienden, a casi dos años de las elecciones, una estructura más democrática y plural que evite los personalismos y las jerarquías y que se gobierne con métodos participativos.
Los firmantes de este documento, llamado ‘La Apuesta Municipalista’ que están en el equipo de la actual alcaldesa, son Rommy Arce, Javier Barbero, Pablo Carmona, Montserrat Galcerán, Celia Mayer, Yolanda Rodríguez, Carlos Sánchez Mato, Mauricio Valiente y Guillermo Zapata.
Ninguno se ha distinguido por haber presentado a la alcaldesa una brillante gestión, incluido el responsable de la Policía Municipal, Javier Barbero. Estos días, por ejemplo, ha faltado un dispositivo capaz de resolver los graves problemas de tráfico que ha tenido la ciudad con los primeros cierres de la Gran Vía. Los bulevares son un atasco permanente, mientras hay un carril bici siempre vacío.
Mientras no ha resuelto los graves problemas de plantilla que hace que, por ejemplo, se hayan suprimido las vacaciones durante las Navidades.
La dimisión de la Gerente
En este ambiente, la dimisión de Carmen Román, Gerente de la ciudad, se interpreta como una fuga importante pues estaba considerada como una persona con gran capacidad profesional, de negociación y conocimiento del mundo del funcionariado.
Personas que conocen los sistemas de trabajo del nuevo equipo de Gobierno señalan que con los métodos que quieren imponer algunos de los ediles de Ahora Madrid es muy difícil hacer una gestión ágil. “Las reuniones, los debates, la burocracia que quieren imponer retrasa las decisiones y mientras tanto la calle está sucia y el tráfico insoportable”, añaden.
