La banda terrorista ETA ha emitido un comunicado este martes en el que anuncia "consecuencias negativas" después de que el Gobierno se negase a entablar con ella una negociación durante los meses que sus dirigentes permanecieron en Oslo (Noruega). Además matiza que la cuestión del desarme no está en la agenda que mantienen los terroristas y la Comisión de Verificación. Según informa Naiz.info, ETA sale al paso de las informaciones acerca de la expulsión de sus dirigentes de Noruega a mediados de febrero augurando "consecuencias negativas" a la decisión de "deshacer el espacio de diálogo y negociación".
Con respecto al comunicado de la banda, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reclamado la "disolución definitiva" de ETA. "Me gusta pensar en positivo, no quiero hablar de consecuencias negativas y las positivas para todos vendrán cuando ETA anuncie definitivamente su desaparición como organización terrorista", ha dicho Rajoy en París en una conferencia de prensa conjunta con el presidente francés, François Hollande.
En el comunicado, la organización criminal considera la expulsión de sus dirigente "un claro paso atrás" en la medida en que "atrasa y dificulta la resolución del conflicto". ETA en su texto arroja críticas a la gestión del Gobierno del PP y de la anterior administración socialista así como al PNV por su apoyo al Ejecutivo. La banda terrorista se refiere a la cuestión del desarme para aclarar que "queda fuera del mandato que se dio la Comisión Internacional de Verificación en su origen y, en consecuencia, no ha estado ni está en la agenda de trabajo de ETA y la Comisión". En este sentido creen que los anuncios de un posible desarme se están utilizando de forma "malévola", a su juicio, para "ocultar la total responsabilidad que tienen los Estados en el bloqueo del proceso".
Propuestas de diálogo
Pese a todo, la banda dice que "seguirá trabajando por construir una resolución definitiva y que mantendrá activa la representación que ha designado". "No cederemos ante las dificultades, porque Euskal Herria merece y necesita la paz y la libertad", zanja.
Las autoridades noruegas expulsaron de su territorio el pasado mes de febrero a los dirigentes de ETA que permanecían en el país escandinavo desde hacía meses. En concreto, tres de sus máximos representantes, David Pla, Iratxe Sorzábal y el histórico 'Josu Ternera' estuvieron allí con la protección de las autoridades locales al menos desde finales de 2011, tras la conferencia de Aiete.
Según informaron a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista, la banda llegó a ofrecer durante este tiempo al Gobierno varias propuestas de diálogo que fueron rechazadas por Madrid. Estas mismas fuentes indicaron que el hastío de las autoridades noruegas ante la falta de avances fue la que determinó la expulsión de los terroristas.
Reacción AVT
Poco después de publicarse el comunicado de ETA, la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Ángeles Pedraza, ha asegurado que las "amenazas" de la banda terrotista en el texto son "la gota que colma el vaso" de las presiones de la banda al Gobierno, que "ahora tiene que mostrar verdaderamente su firmeza de no negociar con asesinos", informa Efe.
"Están viendo que no consiguen lo que quieren tras decidir haber dejado de matar", ha añadido Pedraza que atribuye el nuevo pronunciamiento de la banda terrorista a otro intento de presión al Gobierno para cambiar la política penitenciaria después de que Interior haya denegado a tres presos etarras el tercer grado. Por ello, la presidenta de la AVT exige "ahora más que nunca" firmeza al Ejecutivo para que no acepte el chantaje de unos asesinos que tienen que cumplir en prisión por los crímenes cometidos.