El expresidente de la Generalitat, Quim Torra ha instado este miércoles al próximo Parlament a ser "fiel" al mandato de las urnas que surja de las próximas elecciones, ante las formaciones catalanas de la oposición que considera que ejercen de "guardianes de la represión".
Torra ha regresado a la cámara catalana como invitado para intervenir en el pleno convocado para abordar la inhabilitación que le confirmó el Tribunal Supremo por desobediencia, al incumplir la orden de retirada de la pancarta de los políticos presos y los "exiliado" del Palau de la Generalitat.
En un tono airado, Torra ha recordado que empezó su mandato como un "president sin Govern" -cuando fracasó en su intento de nombrar como consellers a políticos presos- y acaba con "un Govern sin president", lo que pone de relieve la situación "extraordinaria, surrealista y kafkiana" que vive Cataluña, con "todo un Estado en contra", a su juicio.
Sin embargo, ha recalcado a los independentistas que solo depende de ellos el futuro de Cataluña: "Seremos aquello que seamos capaces de ganar, solo depende de nosotros. Hoy de vosotros, diputados, y más adelante de lo que ocuparán estos escaños de la soberanía popular", ha remachado.
"Monarquía española o república catalana"
En este punto, ha pedido que el próximo Parlament "sea fiel al mandato de la ciudadanía" que surja de las elecciones previstas para el próximo febrero, en las que cree que la ciudadanía deberá decidir entre "monarquía española o república catalana".
Y ha prometido que estará "al lado" de los electos que "lideren esta ruptura democrática y sigan al pueblo" en su afán de lograr una república catalana.
En este sentido, ha apelado al soberanismo a defender "con uñas y dientes y hasta las últimas consecuencias la soberanía de los catalanes representada y ejercida por este Parlament".
Y ha pedido volver a dar "un salto colectivo", con "voluntad de ruptura democrática y desobediencia civil", al tiempo que ha insistido en su propuesta de convertir las elecciones catalanas en un "plebiscito de ratificación del 1-O".
Ante el "golpe de estado intolerable" que cree que supone su inhabilitación y otras expresiones de la "represión", ha remarcado que "España debe entender que no puede substituir la voluntad popular por su voluntad de hacer prevaler siempre una idea caduca, impuesta y decimonónica: la sagrada unidad de la patria española".
Asimismo, Torra ha denunciado que algunos diputados del Parlament, en lugar de "defender honestamente sus ideas, vienen a hacer aquí de guardianes de la represión".
"El día que los tribunales europeos me den la razón solo tendré sonrisas de alegría pero nunca llevaré a la justicia una votación democrática de este Parlament", ha subrayado Torra, que ha añadido, en un mensaje dirigido a la oposición: "Vergüenza los que lleváis la libre expresión de los diputados de este Parlament ante la justicia".
En el pleno estaban los líderes de Ciudadanos y PP, pero no en cambio el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ya que su grupo ha decidido no participar de esta sesión dedicada a un president inhabilitado.
Torra sin embargo se ha dirigido a Iceta para acusarle de llevar "40 años sirviéndose de la política", cuando considera que lo que se debería hacer es "servir a los ciudadanos".
