Si a los lunes les sumas lluvia, el resultado son accidentes y atascos. A la vuelta de vacaciones, los madrileños se han encontrado con un viejo conocido: el embotellamiento matinal. Debido al tráfico, que se ha vuelto un tema insoportable como no lo era hace muchos años, miles de personas llegan tarde a su trabajo, a la consulta del médico o al colegio.
Y, ¿qué hace el Ayuntamiento en manos de Manuela Carmena al respecto? Emite un comunicado. En el marco de su política de transparencia, el Gobierno municipal envió una nota de prensa titulada "Restablecida la normalidad en el tráfico". Y, a continuación, decía que "la normalidad en la circulación ha quedado restablecida después de las retenciones producidas esta mañana, ocasionados por tres accidentes y otras trece incidencias de menor entidad". Luego, hacía una relación de los hechos, similares a los que se han producido en los últimos días, y que han provocado que miles de ciudadanos crean que nadie se ocupa del tráfico.
"Hay medidas de emergencia que no resuelven los atascos. Es difícil sin un plan estratégico regional de movilidad", dice la responsable de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés
La reacción de la responsable de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, ha sido tirar balones fuera: “Hay medidas de emergencia que no resuelven los atascos. Es difícil sin un plan estratégico regional de movilidad”. En declaraciones a la Cadena Ser añadió: “Cifuentes sabe que la competencia de que entren un millón de coches en Madrid es de la Comunidad”. O lo que es lo mismo, echaba la culpa de los embotellamientos matutinos a la presidenta regional que pocos minutos antes había exigido que la ciudad funcionara.
Hasta el pasado día 5 de octubre el Ayuntamiento de Carmena pensaba que el tráfico no era un problema. Ese día se sorprendió y comprendió que tenía que hacer algo. La historia se ha repetido este lunes y sucederá este invierno decenas de veces. La economía de los madrileños está algo mejor y ya se nota en el movimiento de los coches, que además tienen una gasolina barata en comparación con los precios de hace unos años.
Plan de movilidad repartido entre municipales
¿Y cuál ha sido la reacción del Ayuntamiento dirigido por Manuela Carmena? Poner en marcha un plan de movilidad que ha repartido entre los policías municipales para que vuelvan a “hacer tráfico”, trabajo que debería hacer la plantilla de teóricamente 1.200 agentes de movilidad del Ayuntamiento de Madrid.
La confusión que hay en Madrid -y en España- sobre el papel de la policía municipal ha provocado que en los últimos años este cuerpo se 'especialice' en temas de seguridad ciudadana y seguridad vial y que, por otro lado, la regulación del tráfico quede para esos 1.200 agentes de movilidad. Pero la realidad es que no son 1.200, son muchos menos. La plantilla la creó Alberto Ruiz-Gallardón tras un viaje a París, pero ha resultado un rotundo fracaso. Puso a mandar a estos agentes a policías municipales en comisión de servicios con sueldos más altos y que no supieron crear una estrategia, no se hizo política de Movilidad ni se coordinó con otros departamentos de la región (Consorcio de Transportes) y del Estado (Ministerio de Fomento).
La desmotivación profesional ha provocado que unos 600 de los 1.200 de los agentes de movilidad hayan abandonado el cuerpo y se hayan ido a la Policía Nacional y Guardia Civil hartos de no poder continuar con una carrera profesional. Además dependen de la Concejalía de Medio Ambiente, y no de Seguridad, la de la Policía, con lo que la descoordinación es absoluta, según denunciaba un sindicalista de CSIT-Unión Profesional.
Reivindicaciones de los agentes
El Gobierno de Manuela Carmena ha logrado enfadarles pues no les contesta a unas reivindicaciones profesionales que consideran básicas: recuperación de la plantilla y que se les integre en la Policía Municipal. El jueves hay una reunión con este colectivo que profesionalmente está desmotivado y que es básico en una situación de crisis como la que se está produciendo estos días.
"No hemos notado ningún cambio entre el anterior gobierno del PP y el actual de Ahora Madrid, que nos desprecia de la misma manera”, dice un portavoz de un sindicato de Movilidad
"No hemos notado ningún cambio entre el anterior gobierno del PP y el actual de Ahora Madrid, que nos desprecia de la misma manera, por lo que si las cosas no cambian saldremos a las calles a protestar para que los ciudadanos conozcan nuestras reivindicaciones”, decía este lunes a este periódico un portavoz de un sindicato de Movilidad.
El Gobierno municipal está preocupado. En caso contrario no hubieran aprobado el documento que pide a los policías que presten atención al tráfico y que monten más de cien puntos para agilizar la circulación. Ayer se podía ver a toda la plantilla, incluidos sargentos y cabos, trabajando en tráfico.
La relación de la Policía Municipal con la Dirección General de Tráfico es básica en esta crisis y debe ser constante. Permite informar a los automovilistas de la situación de las carreteras. Los desplantes de las autoridades municipales con la Guardia Civil en la fiesta de su patrona no ayudan a lograr el mejor ambiente de colaboración, básico, cuando se producen accidentes en las entradas en Madrid como sucedió ayer. Tampoco ayuda dejar en cuadro la Sala de Pantallas desde la que excelentes profesionales informaban a los ciudadanos, vía emisoras de radio, de la situación del tráfico y sus alternativas.