Los equipos de rescate para hallar al niño Julen, que cayó a un pozo en la localidad malagueña de Totalán, han comenzado a abrir un túnel lateral de unos 80 metros, aprovechando la pendiente de la montaña, para intentar llegar a la zona donde se supone que se encuentra el pequeño, ha informado la subdelegada del gobierno en Málaga, María Gámez.
Los trabajos han comenzado a las siete de la mañana de este martes, después de que los equipos de rescate llevasen horas succionando la tierra bajo la que podría encontrarse el niño de dos años, y dado que las máquinas empleadas han encontrado una masa compacta que no se puede sacar, a unos 73 metros de profundidad.
La subdelegada del gobierno ha explicado que ésta es la alternativa más segura de las tres posibilidades que desde este lunes se barajan y que las otras dos, la apertura a cielo abierto y la creación de un túnel paralelo al pozo donde cayó el pequeño, se consideran menos seguras, aunque no están descartadas.
La seguridad del pequeño, el menor tiempo y la orografía
Hay tres factores condicionantes en el operativo, ha dicho Gámez: la seguridad del pequeño, emplear el menor tiempo posible y la orografía del terreno, que dificulta los trabajos.