Vox extiende sus tentáculos políticos en América Latina. La formación liderada por Santiago Abascal trabaja para la creación de una institución internacional alternativa al Foro de São Paulo, el foro de partidos y grupos políticos de izquierda que creó el Partido de los Trabajadores de Brasil en 1990.
También contraria al Grupo de Puebla, donde participan, entre otros, el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero; la ministra de Igualdad, Irene Montero, o los también expresidentes de Bolivia y Uruguay, Evo Morales y José Mújica, respectivamente.
El mismo Santiago Abascal ha sido el encargado de avanzar la iniciativa en un contexto en el que la izquierda latinoamericana está en plena etapa de redefinición tras una secuencia de importantes victorias electorales como la de Perú y ante las próximas elecciones en la convulsa Nicaragua. Daniel Ortega busca su quinto mandato presidencial -la reforma constitucional eliminó los límites a la reelección- en medio de una ola de detenciones a opositores.
El partido pretende dar el salto y crear junto a otras fuerzas y líderes políticos un "foro organizado" para frenar el avance de la izquierda
Según adelantó el dirigente de Vox este lunes, su partido pretende dar el salto y crear junto a otras fuerzas y líderes políticos un "foro organizado" para frenar el avance de la izquierda en América Latina. "Estamos entablando relaciones para crear un foro organizado de oposición a lo que ha sido el foro de São Paolo y el Grupo de Puebla", ha apuntado.
Vox quiere ir más allá de cartas, cumbres, manifiestos y fundaciones. Aunque la iniciativa está echando a andar, Abascal ha asegurado que se trataría de una "estructura internacional" que busca "operar como una auténtica oposición en defensa de las libertades". No solo en América Latina, sino también en lo que el partido denomina "Iberosfera". La entidad tendría cabida, dice, para personas con distintas ideologías "pero que se opongan a la deriva comunista".
Vox y sus lazos con la derecha latinoamericana
El partido lleva tiempo estrechando lazos con el entorno de Trump en EEUU y con la derecha latinoamericana, además de europea. Algo que quedó claro incluso en los discursos de la moción de censura contra Pedro Sánchez.
"La Iberosfera, un concepto en el que luego me detendré porque es clave para el futuro y las soluciones que necesita España", aseguró Abascal. El diputado Ignacio Garriga, encargado de presentar la "alternativa" al Ejecutivo de Sánchez secundó al candidato: "La alianza de este Gobierno con la tiranía de Nicolás Maduro en Venezuela es un ataque a la libertad y a los lazos que nos mantienen unidos con los países de la Iberosfera".
Desde su creación, la Fundación Disenso, laboratorio de ideas de Vox presidido por Abascal, ha lanzado varias iniciativas en la mima línea. En primavera presentó su programa Jóvenes Líderes de la Iberosfera, una iniciativa que tiene como objetivo formar a futuros dirigentes del ámbito público y social en los países de dicha región para la defensa de la libertad, el Estado de Derecho y la democracia. Tal y como adelantó Vozpópuli, está dirigido a jóvenes entre 25 y 35 años y se imparte en Estados Unidos, España, Italia, Polonia y Francia.
Además, puso en marcha el diario La Gaceta de la Iberosfera, un medio digital que pretende extender por toda América Latina, y la llamada Carta de Madrid.
Con el mismo objetivo, Vox puso en marcha un 'think tank', lanzó un programa para estudiantes y lanzó la Carta de Madrid
Esta suerte de manifiesto pretende convertirse en declaración de intenciones de líderes de Occidente para frenar, como indica la propia misiva, "el avance del comunismo", que actualmente "supone una seria amenaza para la prosperidad y el desarrollo de nuestras naciones, así como para las libertades y los derechos de nuestros compatriotas".
Entre los firmantes, destaca el hijo de Eduardo Bolsonaro (diputado e hijo de Jair Bolsonaro); la disidente y escritora cubana Zoe Valdés; el actor mexicano Eduardo Verástegui, hispano de referencia para el expresidente de EEUU Donald Trump y su aliada por excelencia en Europa: la presidenta del partido italiano Fratelli d'Italia, Giorgia Meloni.
Precisamente, Meloni preside el Grupo de Conservadores y Reformistas Europeos en el Parlamento Europeo (ECR, por sus siglas en inglés) que organizó antes de verano una cumbre iberoamericana ECR-Eurolat. "El primer gran foro internacional en defensa de la democracia y la libertad contra la amenaza comunista en la Iberosfera", en palabras de Vox.
El foro nació el pasado 9 de marzo como grupo de acción política del Parlamento Europeo a propuesta de Vox y con el fin de "estrechar las relaciones entre la Unión Europea y las fuerzas democráticas del continente hispanoamericano". "Su objetivo es abrir una alternativa a la política de apaciguamiento, paños calientes y complicidad de las instituciones de la UE con las narcodictaduras comunistas y socialistas de Iberoamérica, unidas en torno al Grupo de Puebla y el Foro de São Paulo controlados por Cuba", explicó la formación.
Ahora, Vox y sus aliados internacionales pretenden organizar las iniciativas que parten de sus diversos satélites y lanzar un foro con peso político y capacidad para hacer presión que sirva de oposición al discurso de los ex dirigentes que participan en el Grupo de Puebla.