El vino ecológico es tendencia. Dentro del interés que suscitan actualmente entre los consumidores la sostenibilidad, trazabilidad y elaboración de los alimentos, el vino posee exactamente el mismo perfil e idénticas expectativas en el mercado. Muchas bodegas no han sido ajenas a esta realidad y han apostado por producir de manera orgánica en muchas ocasiones según unas normas establecidas reguladas, tanto en España como en la Unión Europea.
Un 13% de viñedo ecológico
Una alternativa importante que en nuestro país cada vez tiene más importancia. Según los últimos datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) en 2019 el viñedo ecológico se incrementó un 4,8% respecto al año anterior, lo que supone el 20% de la superficie total de cultivos permanentes y el 12,7% de la superficie total del viñedo. Entre las comunidades autónomas, Castilla- La Mancha se lleva la palma con 61.260,6 hectáreas.
Son vinos elaborados con uvas cultivadas de forma ecológica, sin pesticidas, fungicidas ni otras sustancias químicas. Y esto, desde el campo hasta el embotellado final.
Somos líderes y hay un movimiento importante que aboga por esta escrupulosa filosofía que debe seguir normativas exigentes, tanto en cultivo como en elaboración. Son vinos elaborados con uvas cultivadas de forma ecológica, sin pesticidas, fungicidas ni otras sustancias químicas. Y esto, desde el campo hasta el embotellado final.
Certificaciones imprescindibles
Deben seguir la normativa europea y estar certificados por organismos independientes que avalen que cumplen las reglas establecidas en una rigurosa legislación. Para que el potencial comprador lo pueda comprobar fácilmente, debe tener una etiqueta específica (suele ir en la contraetiqueta) con el logo, habitualmente una hoja en verde y blanco o similar.Hemos hecho una selección de distintas etiquetas ecológicas que no te defraudarán: cuatro vinos bien hechos, interesantes y con personalidad. Como siempre, cuidadosamente escogidos y catados.
1.- Marco Real Organic Wine 2018
Vinos y Bodegas Marco Real/ D.O. Ca. RiojaPVP recomendado: 9,5 eurosUna novedad en el mercado que, con el slogan “Conéctate a lo natural”, la bodega demuestra su compromiso con el medio ambiente y la viticultura tradicional. Es el primer vino ecológico (ya certificado) de esta casa y está elaborado con tempranillo (60%), garnacha y graciano de viñedos de viticultura sostenible. Se ha criado tan sólo seis meses en roble americano, por lo que permanece la fruta con fuerza. Es un vino redondo, equilibrado y sabroso. Una alternativa ecológica a buena relación calidad- precio.
2.- Vía Edetana 2019
B. Edetària/ D.O. Terra AltaPVP recomendado: 12,50 eurosEs el primer vino ecológico certificado de esta bodega, que ha logrado unos espectaculares resultados. Con un 70% de garnacha blanca (viñas con más de 40 años) y el resto de viognier es un vino original, potente y que llena la boca. La mitad de los mostos están criados en barricas de roble francés de tueste especial para la garnacha blanca (4 meses) y el resto en inoxidable con las lías. Una elaboración preciosista y cuidadosa para un vino amplio, untuoso y mineral. Estamos ante un blanco gastronómico que, sabiendo pedir, aguantara perfectamente una comida. 
3.- La Felisa 2019
B. Emilio Moro/ D.O. Ribera del DueroPVP recomendado: 27 eurosUn vino ecológico, ya certificado, en su nueva añada 2019 que acaba de salir al mercado. La Felisa sigue contando muchas cosas de esta bodega porque es el homenaje de Javier y José Moro a su madre, quien fue clave en el desarrollo de esta casa, ahora ya en tercera generación. Fue su primer vino ecológico, sin sulfitos añadidos y fruto de una investigación anterior de años. Está elaborado con tinto fino y maduró en roble francés desde 225 a 500 litros de capacidad. Resulta frutal, fresco aunque persistente, de tanino marcado y buena acidez. Un vino elaborado con corazón y sabiduría vinícola. 
4.- ÁN/2 2018
B. Ánima Negra/ Ví Terra Illes BalearsPVP recomendado: 20 eurosUn vino reconocible al primer sorbo por el sello único que imprime ésta bodega a sus creaciones. Aunque no tiene el sello ecológico en su etiquetado, hace ya muchos años que esta casa elabora escrupulosamente de esta manera, tanto en viñedo como en elaboración (incluso con levaduras propias). Clima, tierra y variedades autóctonas (callet, manto negro y fogoneu) junto a un 15% de uva syrah que resulta pura expresión del terroir. Se cría durante un año en roble francés y americano (toneles de 225 litros). Tiene especias, cuero, tabaco… aún así es delicado, evanescente y elegante. Un logro, un año más.
