Mari Carmen Romano (Santander, 1972) llevaba ocho años trabajando como secretaria bilingüe en una empresa del sector del metal cuando un reajuste hizo que la despidieran. Con más de cuarenta años, pensó que su experiencia y sus capacidades serían un pasaporte suficiente para reengancharse sin demasiados problemas al mercado laboral. Pero, después de realizar varias entrevistas, se dio cuenta de que sus opciones de retomar su profesión no eran tan halagüeñas como había pensado inicialmente. “Buscaban a gente más joven. Como me dijeron en una ocasión, alguien a quien pudieran ‘domar’, dispuesto a aceptar determinadas condiciones de salario y horarios”, lamenta.
Tenía que tomar una decisión. O bien seguía buscando un trabajo similar al que había venido realizando –opción a la que veía pocas perspectivas de éxito–, o bien se reinventaba profesionalmente. Tras un breve paso por el entorno sanitario, la casualidad y sus conocimientos de inglés le llevaron a impartir unas clases particulares a unos niños, un mundo que nunca le había atraído especialmente. “Yo siempre había sido reacia a dar clases, creía que no valía para ello”, recuerda. Sin embargo, aquellas primeras experiencias despertaron en ella una vocación que no sabía que tenía. En ese momento supo hacia dónde quería encaminar su carrera.
Eso sí, también tomó conciencia de que para completar con éxito ese tránsito le hacía falta algo más que su motivación. “Descubrí que disfrutaba mucho con los niños y ellos conmigo. Pero también que me faltaba base, metodología”. Así que antes de continuar por ese camino, decidió que se prepararía a fondo, y se matriculó en el Grado de Magisterio en Educación Primaria en la Universidad de Cantabria.
Un mercado laboral convulso
Mari Carmen no es la primera persona que, en un momento dado de su vida, ha tenido que replantearse su orientación profesional. Y es que el mercado laboral ha cambiado drásticamente en los últimos años. Digitalización, sostenibilidad, teletrabajo o las nuevas metodologías ágiles marcan el nuevo rumbo del empleo. Unas transformaciones a las que hay que sumar los efectos devastadores que la pandemia está teniendo en el mundo del trabajo. Muchos jóvenes que estaban llamados a incorporarse ahora al mercado de trabajo han visto sus planes frustrados, y miles de personas han perdido sus puestos a consecuencia de la crisis sanitaria y sus derivadas económicas.
La recuperación del empleo se ha convertido en una prioridad para todos los estamentos de la sociedad. Y en esa misión colectiva, las grandes empresas tienen la posibilidad y la responsabilidad de ayudar a desbloquear las palancas laborales como primera parada de la recuperación económica del país. Con ese propósito en mente, Banco Santander, a través de Santander Universidades, acaba de lanzar un ambicioso plan de 30.000 becas en España en 2021 para ayudar mejorar el acceso de jóvenes y profesionales al mercado laboral, facilitar el acceso a los estudios en condiciones de igualdad e impulsar el emprendimiento universitario. Estas ayudas se unen a las más de 156.000 becas concedidas por la entidad el año pasado en todo el mundo.
Parte de los programas de Becas Santander que se están poniendo en marcha desde principios de este año, buscan mejorar la empleabilidad de sus beneficiarios a través de propuestas formativas de reskilling (reciclaje profesional) o upskilling (capacitación en nuevas competencias).
Entre ellos, encontramos algunos como las ‘Becas Santander Tecnología| Digital Experience IBM’, cuyos beneficiarios tendrán la oportunidad de recibir formación para mejorar sus capacidades digitales y formarse en tecnologías como la inteligencia artificial o la ciberseguridad; o las ‘Becas Habilidades | Evolution’, que busca dotar de las mejores capacidades a aquellos que se enfrentan a los procesos de selección cada vez más exigentes de las empresas de cara a la contratación de personal.
Reducir la brecha digital
Reducir la brecha digital en el ámbito de la educación es uno de los focos de actuación de estas medidas. Mediante un programa específico de 1.520 ‘Becas Santander Tecnología| Conecta’, la entidad proporcionará un ordenador portátil a estudiantes con dificultades económicas y una ayuda de 350 euros para soluciones de conectividad durante el próximo curso académico.
Estas ayudas, que ya tuvieron un precedente en 2020, al inicio de la pandemia, no están únicamente dirigidas a los jóvenes, sino que también pueden beneficiarse de ellas otros profesionales que deseen reorientar su futuro laboral. Es, precisamente, el caso de Mari Carmen Romano. Cuando estalló la pandemia tuvo que interrumpir sus clases presenciales en la Universidad. En aquel momento Banco Santander le cedió un ordenador para que pudiera continuar sus estudios en modalidad digital. Unas facilidades de las que está disfrutando de nuevo en este curso.
Para Romano, que actualmente cursa segundo curso de su carrera, toda ayuda es bienvenida, especialmente en un proceso de reinvención profesional tan profundo. “Empezar de cero es muy duro. Te encuentras con muchas puertas cerradas, falta de información y de apoyos. Es un proceso que tiene un coste, tanto personal como psicológico, importante y en el que te asaltan muchas dudas”, explica.
Las becas de Banco Santander buscan incrementar la empleabilidad y adaptar las competencias de jóvenes y profesionales a las necesidades del mercado actual
Pero, una vez dado, también es un salto que proporciona muchas satisfacciones. “Con la carrera voy lenta, pero segura. Estoy sacando muy buenas notas y disfrutando mucho con mis compañeros más jóvenes”, comenta esta cántabra. La futura profesora asegura sentirse muy “orgullosa e ilusionada” con el camino elegido. Su hija, que ya tiene 15 años, es su aliada más incondicional. “Hacer lo que uno quiere hacer y que tus personas queridas te apoyen es de las mejores cosas que te pueden suceder”, afirma.
¿Algún consejo para otras personas que estén valorando dar ese paso? “Tienes que pararte a pensar cuáles son los sueños que se han quedado por cumplir. Marcarte un objetivo y luego sopesar muy bien si está a tu alcance. Hay que analizar, de la manera más objetiva posible, si tienes las capacidades, recursos, disponibilidad y una situación familiar que te permitan abordar esa aventura”. ¿Y si todos los astros estás alineados? Entonces, recalca Mari Carmen Romano, solo queda una cosa por hacer: lanzarse. “Porque, si te esfuerzas y crees en ti mismo, casi nada es imposible”.
Banco Santander ha destinado más de 2.000 millones de euros en total y ha concedido más de 630.000 becas y ayudas desde su puesta en marcha. Para cuando finalice 2021, habrá entregado 325.000 desde 2019.
