La Comisión Europea hará pública este miércoles el llamado Pacto Verde Europeo, una hoja de ruta pensada para que el bloque consiga reducir completamente sus emisiones a mitad de siglo y asuma un papel de liderazgo a nivel global en la lucha contra el cambio climático y la protección del medio ambiente.
La nueva jefa del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, ha hecho de la cuestión climática uno de los busques insignia de su mandato y así lo expresó en julio en su primera comparecencia ante el Parlamento Europeo antes de superar la votación que confirmaba su nombramiento.
En ese momento, la conservadora alemana defendió que el objetivo de reducción de emisiones para 2030 fijado actualmente, del 40%, "no es suficiente" y la UE debe "ir más allá". "Es necesario un planteamiento en dos fases para reducir las emisiones de CO2 de aquí a 2030 en un 50 % o incluso en un 55 %", dijo.
En cualquier caso, el documento que Bruselas presentará este miércoles incluirá únicamente medidas que se irán desarrollando a lo largo de los meses siguientes. Es decir, será una declaración de intenciones que más tarde se tendrá que ir materializando en forma de propuestas legislativas que deberán ser aprobadas después por la Eurocámara y los gobiernos comunitarios.
Durante su intervención en la COP25 de Madrid el pasado lunes, Von der Leyen ya adelantó que el camino hacia la neutralidad climática de la UE comenzará en marzo con la presentación de la primera ley climática europea, que hará "irreversible" esta transición.
Esta normativa incluirá también una reforma del sistema europeo de comercio de emisiones (ETS, por sus siglas en inglés) para encarecer el precio de las emisiones. El sector marítimo, hasta ahora excluido de este sistema, pasará a formar parte del mismo, en el que además se reducirán los créditos gratuitos que se conceden a las aerolíneas.
Otro elemento importante en el plan para reducir las emisiones será la creación de un impuesto en frontera sobre las importaciones energéticas de carbono. Aunque el Ejecutivo comunitario todavía debe definir los detalles de este gravamen, sí que ha prometido que cumplirá con las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y que tendrá una introducción gradual.
Plan de inversiones y fondo de transición justa
La estrategia de la nueva Comisión Europea pasa además por alimentar financiera este recorrido a través de un Plan de Inversiones Sostenibles, con el que pretende desbloquear hasta un billón de euros en inversiones 'verdes' durante la próxima década.
Para conseguirlo, propondrá transformar el Banco Europeo de Inversiones (BEI) en un "banco climático" que tendrá el objetivo de conseguir que en 2025 al menos la mitad de la financiación que conceda esté encaminada a apoyar proyectos 'verdes'.
El BEI reformado también tendrá un papel en el contexto del nuevo Fondo para una Transición Justa que la alemana quiere poner en marcha para apoyar a todas las regiones europeas en esta transición y que ninguna "se quede atrás".
"No todas nuestras regiones parten del mismo punto, pero todos compartimos el mismo destino", subrayó Von der Leyen en julio ante los eurodiputados. El objetivo de Bruselas es que este fondo consiga movilizar hasta 100.000 millones de euros de inversiones públicas y privadas entre 2021 y 2027.