El Gobierno alemán ha confirmado este viernes la filtración durante las últimas horas de datos personales pertenecientes a más de 400 políticos estatales y federales del país, entre ellos los de la canciller la canciller Angela Merkel y del presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, excepto de la formación ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD).
Entre los datos de Merkel se encontrarían su número de fax, su dirección de correo electrónico y varias cartas cuyo contenido todavía se desconoce, pero una portavoz de la canciller ha asegurado que el alcance de la filtración, por lo que a la mandataria respecta, ha sido limitado.
Información sensible
"En relación a la Cancillería puedo decir, según las informaciones iniciales, que no se ha publicado información sensible, incluida la que se refiere a la canciller", ha confirmado una portavoz a la agencia Reuters.
Aunque la filtración tampoco parece haber afectado ni al Ejército alemán ni a la red de seguridad interna del Gobierno alemán, según han confirmado las autoridades, los medios alemanes ya la describen, por su envergadura, como "la mayor fuga de datos de la historia del país".
De momento, el 'Bild' confirma que se han visto afectados unos 294 integrantes del Partido Socialdemócrata (SDP), 105 de los Verdes, 82 de La Izquierda y 28 en el Partido Liberal Demócrata (FDP). También se han publicado datos de responsables de los grupos parlamentarios de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) que lidera Merkel.
Entre los documentos publicados, muchos de los cuales solo pueden obtenerse previo pago, hay números de teléfono móvil, direcciones personales, transcripciones de comunicaciones por Internet, cartas, facturas o información de tarjetas de crédito. Sobre los datos de Alternativa para Alemania se desconoce si han sido evitados deliberadamente o los filtradores tienen previsto publicarlos en próximas fechas.
La difusión, además, ha afectado a más de una treintena de periodistas de las cadenas ARD y ZDF, de acuerdo con el 'Bild'.
El responsable de la publicación es el propietario de una cuenta de Twitter que se describe a sí mismo como un "investigador de seguridad, artista y sátiro", pero la Policía todavía no ha confirmado si se trata de la misma persona que accedió a la información personal de los políticos.
Las fuerzas de seguridad alemanas se dieron cuenta de la filtración a última hora del jueves y desde entonces están intentando controlar la dispersión de los datos, de acuerdo con las fuentes del medio, y para verificar la autenticidad de la información difundida.
La ministra de Justicia de Alemania, Katarina Barley, ya ha condenado esta filtración, que ha descrito como "grave". "El autor de este ataque quiere dañar la confianza en nuestra democracia y en nuestras instituciones", ha manifestado en declaraciones recogidas por la agencia de noticias DPA.
"Estos criminales y quienes les respaldan no deben bajo ningún concepto dictar los términos de debate alguno en nuestro país", ha añadido.