Expulsado por su propio partido. El ultraderechista Frente Nacional francés (FN) suspendió este lunes de militancia al fundador del partido, Jean-Marie Le Pen, y convocará una asamblea general extraordinaria para suprimir su estatus de presidente de honor en los próximos tres meses. En un comunicado, el comité ejecutivo de la formación anunció el castigo que le será aplicado por sus polémicas declaraciones a Le Pen, enfrentado a la cúpula del partido y en particular a su hija y presidenta del FN, Marine Le Pen.
La suspensión de militancia será efectiva al menos hasta que la asamblea general vote sobre su continuidad o no como presidente de honor. Además de modificar el artículo sobre la presidencia de honor del partido, la asamblea general servirá también para una remodelación "más completa" de los estatutos, de acuerdo a la nota. Como miembro del comité ejecutivo -que este lunes se reunió en su forma de máximo órgano disciplinario-, Le Pen debía haber participado en el encuentro que abordaba su castigo, pero, tras una reunión de la ejecutiva esta mañana, decidió marcharse, en un nuevo desafío a la cúpula.
"He sido desautorizado", dijo el veterano líder ultraderechista, de 86 años, tras abandonar la sede de la formación en Nanterre, en las afueras de París. En una moción aprobada por la ejecutiva, el partido consideró que "los comentarios o tomas de posición del presidente de honor no pueden en ningún caso comprometer al Frente Nacional, a su presidenta o a sus instancias deliberantes". La crisis del partido llegó tras las últimas declaraciones provocadoras de Le Pen a la revista "Rivarol", en las que aseguraba que las cámaras de gas nazis fueron un "detalle" de la historia y que el colaboracionista mariscal Petain no podía ser considerado un "traidor".