Volodímir Zelenski, el presidente de Ucrania denunció que Corea del Norte preparaba el envío de efectivos al frente ruso-ucraniano para socorrer al Ejército de su aliado que ha perdido posiciones en pos de Kiev. "Es el primer paso a la guerra mundial", denunciaba el jefe del Ejecutivo ucraniano, que en una reunión en Bruselas, hace más de una semana, alertaba que Putin tiene a su disposición 10.000 soldados norcoreanos listos "para luchar" contra Ucrania y en favor de Rusia, y que éstos se encuentran desplegados "en el territorio ocupado del Donbás".
Una semana más tarde los Estados Unidos de América (EE. UU.) y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) confirmaban la presencia de efectivos norcoreanos en primera línea a la espera de órdenes para entrar en combate. Existe un acuerdo entre estos dos países para el apoyo militar mutuo: el Tratado de Asociación Estratégica Integral entre Rusia y Corea del Norte. Éste se firmó el pasado 19 de junio en la visita del presidente ruso a la capital norcoreana, y recientemente ha sido ratificado por 397 diputados de la Duma, la Cámara Baja rusa. En dicho tratado, el artículo 4 prevé la asistencia militar inmediata en caso de agresión armada por parte de terceros países. Dicho artículo todavía no ha sido involcado por Putin desde que comenzara la guerra con Ucrania.
Un aislamiento sin precedentes
Y es que esos 10.000 soldados norcoreanos -cifrados en hasta 12.000- apenas suponen un esfuerzo para el hermético país, que cuenta con un gran número de efectivos en proporción a una población que no llega a los 30 millones, en el puesto número 56 a nivel mundial y con un número de habitantes similar al de Níger, Autralia, Siria o Mali. El aislamiento en el que vive Corea del Norte no tiene precedentes. Kim Jong-un depende de sus dos aliados, China y Rusia para obtener aquello que no pueden fabricar, y no siempre pueden satisfacer las necesidades de su pequeño aliado.
Corea del Norte no tiene los avances tecnológicos que puedan tener otros países debido a ese aislacionismo y que sólo tiene dos socios que le ayuden a obtener los recursos que su geografía no le ofrece. Esto tampoco significa que el país asiático viva en paralelo al resto del mundo, como otras pequeñas tribus en el Amazonas o el Índico, y buena prueba de ello son sus fuerzas armadas, que aún con potencia, es un ejército que sufre las suficientes carencias como para desestabilizarlo. La escasez de suministros y alimento, la corrupción o la propia política aislacionista, son suficientes factores para convertirse en obstáculos para las Ejército norcoreano.
Un creciente arsenal nuclear
Si hay algo en lo que el régimen norcoreano no repara en gastos es en su armamento, y en los últimos años en su creciente arsenal nuclear, y es que las fuerzas convencionales de Corea del Norte, son una de las mayores del mundo. Y es que Corea del Norte es probablemente uno de los países más militarizados del mundo, sino el que más. El Gobierno tiene fuertes campañas de propaganda que aboga por "armar a toda la población" y defender a su líder, Kim Jong-un, como "fusiles y bombas humanas".
Sin embargo, décadas de aislamiento y sanciones internacionales han terminado por menoscavar la economía del país asiático, que incluso llegó a sufrir una hambruna en los 90. Como resultado de esta situación, las armas convencionales con las que cuenta Corea del Norte son restos, desactualizados, y de una época pasada. Material y armamento militar soviético que durante los años de URSS fueron recopilando y acumulando; y que con un buen mantemiento lucen imponentes en los desfiles militares en Pionyang.
Pero esos desfiles no son más que una fachada utilizada por el régimen para lucirse ante la comunidad internacional. Los pilotos norcoreanos apenas pueden reunir horas de vuelo por la falta de combustible; además de que el ejército tiene -de forma generalizada- falta de alimentos, gasolina y piezas de repuesto para los vehículos. Además, los soldados norcoreanos tienen un periodo obligatorio durante el cual deben servir en el Ejército, y suele rondar entre los ocho y diez años.
A pesar de la escasez de suministros, Corea del Norte mantiene aproximadamente en activo 1,3 millones de soldados, y otros 7,6 millones de civiles como reservistas -lo que viene a ser aproximadamente un 30% de la población total- convirtiendo al páis asiático en el cuarto ejército más grande del mundo. La manera que tiene Pionyang de mantener tantos efectivos es a través del servicio militar obligatorio, obligando a los hombres a servir durante ocho o diez años y a ellas, cinco.
En cuanto al resto del arsenal al servicio de Kim Jong-un, según su vecino del sur, el regimen norcoreano cuenta con 4.300 tanques, 8.800 piezas de artillería, 810 aviones de combate y 70 submarinos. Además, según oficiales surcoreanos, Corea del Norte estaría desarrollando misiles nucleares y almacenando aproximadamente 5.000 toneladas de armas químicas. Y lo más moderno de los efectivos militares son 6.800 hackers con capacidad de atacar las redes informáticas de cualquiera de sus enemigos, datos hechos públicos por Corea del Sur.
Los carros de combate se remotan a la época de la Guerra Civil y todos son de procedencia rusa o china. Corea del Norte cuenta con T-54 / 55 de procedencia rusa, junto con T-54 fabricados entre1947 y 1981, con cañón estriado de 100 mm. A partir de los 70, Corea del Norte comenzó a producir carros T-62, también de procedencia rusa y el que fuera durante una década el vehículo armado principal de la URSS. Otros vehículos blindados desplegados por el regimen e Piongyang son el carro ligero P-76.
En cuanto a la tecnología china utilizada por Corea del Norte, son los carros de combate Tipo 59 o los vehículos ligeros blindados M-985 o los Tipo 62 y 63, una variante producida por el gigante asiático de origen ruso.