El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi anunció este sábado el regreso de su anterior partido político, el conservador Forza Italia, que permaneció activo de 1994 a 2009, cuando oficialmente se fusionó con Alianza Nacional en el actual Pueblo de la Libertad (PDL). En una entrevista para la televisión pública italiana Rai, el político y empresario expresó sus sospechas de que él está llamado a ser, de nuevo, el líder del partido, después de que en los últimos días se especulara con la posibilidad de que la número uno pasara a ser su primogénita, Marina, presidenta del grupo familiar Fininvest.
"El PDL seguirá como coalición de partidos de centroderecha: Forza Italia formará parte de ella y temo que yo estaré llamado a ser de nuevo el número uno", dijo Berlusconi, quien a sus 76 años sigue en la primera línea de la vida política italiana bajo la amenaza de la inhabilitación por parte de dos procesos judiciales, sobre todo el caso Ruby.
El ex primer ministro se refirió precisamente a este último proceso, por el que esta semana fue condenado en primer grado a 7 años de prisión e inhabilitación de por vida para cargo público por abuso de poder e incitación a la prostitución de menores.
Según Berlusconi, la condena por el caso Ruby es "de verdad grotesca" y llega, como con el resto de procesos que tiene abiertos, porque "se intenta concluir una guerra que dura ya veinte años" contra su persona.
"Hay un abuso de poder con un supuesto abusado que niega haberlo sufrido; hay una incitación a la prostitución con una incitada que niega haber tenido ninguna relación. Más allá de todo, para llevar a la sentencia, el tribunal ha tenido que invitar a la Fiscalía a investigar a 32 testigos. Una cosa que, de verdad, nunca se ha visto", comentó el líder conservador.
Sobre el caso Mondadori, que ha llegado ya al Tribunal Supremo después de que su grupo empresarial fuera condenado en apelación a pagar 560 millones de euros al conglomerado CIR de Carlo de Benedetti por la pugna por la editorial, Berlusconi dijo que el perjuicio lo sufrió él por tener que vender posteriormente el diario "La Repubblica", la revista "L'Espresso" y otros 18 periódicos.
"Cuando se me obligó a sentarme a la mesa y vender estas cabeceras de Mondadori -apuntó-, yo me quedé apenado y De Benedetti se levantó muy contento y satisfecho, como demuestran los vídeos que hay por ahí en estos días que muestran una entrevista que él concedió".
Berlusconi insistió una vez más en la necesaria reforma del sistema judicial italiano y en el apoyo que su partido seguirá dando al Ejecutivo de coalición en el que participa, entre otros, con el viceprimer ministro, Angelino Alfano, a pesar de que algunos lo hayan cuestionado tras las últimas decisiones judiciales.
"Es un apoyo convencido y absolutamente leal el del PDL al Gobierno. Las declaraciones de algún exponente del PDL tienen que entenderse como un estímulo para hacer más", aseveró el ex primer ministro.