Tras la muerte de Isabel II, fallecida el jueves 8 de septiembre, a los 96 años de edad, se han vuelto a recuperar varios episodios de la vida de la soberana, entre ellos la complicada y mala relación que existía entre ella y la que fue su nuera, Diana de Gales (Lady Di). Una relación que se vio dañada y perjudicada sobre todo por la larga relación extramatrimonial del príncipe Carlos de Inglaterra, ahora convertido en el rey Carlos III, con Camilla Parker Bowles, nueva reina consorte.
La reina de Inglaterra conoció a Diana Spencer en 1980 cuando ella tenía 19 años de edad, y ya era novia de su hijo Carlos, doce años mayor que ella. Se conocieron solo un año antes de que la pareja celebrara su boda el 29 de julio de 1981 en la Catedral de San Pablo, en Londres (Reino Unido).
Según relató el biógrafo real Andrew Morton en su libro 'Diana: Her True Story – In Her Own Words' (en español, 'Diana: su verdadera historia), la relación entre la princesa Diana e Isabel II comenzó siendo tensa e incómoda. "En los primeros días, Diana simplemente estaba aterrorizada de su suegra. Mantuvo las exequias formales, haciendo una profunda reverencia cada vez que se encontraban, pero por lo demás mantuvo la distancia", escribió.
La relación de Isabel II con Diana de Gales fue buena al principio
Cuando Lady Di fue madre por primera vez del príncipe Guillermo, el 21 de junio de 1982, comenzaron a involucrarla en la agenda de la familia real británica y empezó a asumir roles gradualmente. Fue entonces cuando suegra y nuera comenzaron a tener más contacto y relación.
Al principio la relación entre la reina Isabel II y Diana de Gales fue buena. La experta real Ingrid Seward escribió en su libro de 2002 'The Queen and Di', que tras el nacimiento de Willy, Isabel era más “comprensiva con las dificultades de Diana” y desarrollaron un fuerte vínculo. Incluso Diana le desveló en una ocasión a Seward que tenía “la mejor suegra del mundo”.
Se enturbió tras conocerse la infidelidad de Carlos con Camilla Parker
Cinco años después, comenzaron los rumores de infidelidad de Carlos de Inglaterra con Camilla Parker-Bowles, una aventura que se acabó confirmando y quedó al descubierto en 1993, un mes después de que se anunciase de forma oficial la separación del Príncipe y Diana que fue en diciembre de 1992.
Fue entonces cuando la prensa británica filtró una bochornosa e íntima conversación telefónica entre el príncipe Carlos y su amante Camilla. En la grabación, que se hizo en 1989 y eran seis minutos de alto contenido erótico, se escuchaba supuestamente al príncipe Carlos diciéndole a Camilla, que quería ser su tampax (tampón). Un escándalo que recibió el nombre de 'tampongate'.
Tras conocer la aventura de Carlos de Inglaterra y Camilla, Lady Di encontró un apoyo en la reina de Inglaterra
La relación de Isabel II y Lady Di empeoró cuando la última supo de la aventura de su marido a pesar de que en ese momento la princesa se apoyó en la reina de Inglaterra. El biógrafo real Morton explicó que Diana encontró "quizás un aliado bastante improbable en el palacio en la reina, cuya actitud comprensiva y servicial hizo mucho para animar a Diana a seguir adelante".
Sin embargo, los años fueron pasando y Diana siguió sufriendo en silencio, los desaires y aventuras extramatrimoniales de su marido. Entonces la relación entre ambas comenzó a ser más distante y tensa. Por un lado, Diana no recibió el apoyo que esperaba de Isabel II, y por otro, la soberana se cansó de las respuestas emocionales de Diana. La princesa padeció de bulimia y comenzó a autolesionarse, según reveló años después, algo que desconocía Isabel II en aquel entonces.
La periodista y escritora, Silvia Taulés, también ha hablado de la relación de la Reina con Lady Di tras la muerte de Isabel II. Esta apuntó que "era mala" y "se fue deteriorando con los años". Según ha señalado en el programa 'La Sexta Clave', Diana "pedía ayuda a la Reina para que la ayudara en su relación con Carlos y ella nunca la ayudó porque no quería entrometerse en esa situación y porque lo veía como algo muy incómodo".
La Reina les aconsejó a Carlos y Diana que se divorciaran
El matrimonio se separó en diciembre de 1992, poco después de que la ruptura de su relación se hiciera pública. En 1995, la Reina envió cartas a Carlos y Diana aconsejándoles que se divorciasen. Finalmente, el divorcio llegó a finales de agosto de 1996. Esta decisión fue muy meditada ya que se penaba que se había divorcio, se produciría el fin de la familia real, pero no fue así.
Durante todos los años que perteneció a la familia real, Lady Di se ganó el corazón de miles de británicos y personas de todo el mundo. de ahí que se refirieran a ella como 'La princesa del pueblo'.
Diana comenzó a dar entrevistas personales, en una de ellas, la que concedió a la BBC llegó a decir que Carlos le había sido infiel. "Éramos tres en mi matrimonio. Y eso es una multitud", confirmó. Además también ella desveló su infidelidad con su profesor de equitación, James Hewitt, así como los problemas médicos y emocionales que padeció durante su matrimonio con Carlos.
Un año después de su divorcio, se produjo la muerte de Diana, fallecida a los 36 años de edad en un accidente de coche en París el 31 de agosto de 1997 mientras viajaba con su pareja Dodi Al-Fayed. El pasado 31 de agosto se cumplió el 25 aniversario de su fallecimiento.
El 9 de abril de 2005, el príncipe Carlos de Inglaterra se casó con Camilla. Sin embargo, no asistieron a la boda ni la reina Isabel II ni el príncipe Felipe.
Antes de su muerte, la reina Isabel II dejó por escrito algo muy importante: "Es mi sincero deseo que, cuando llegue ese momento, Camila sea conocida como reina consorte mientras continúa con su leal servicio". Unas palabras que eran la prueba de la buena relación que existía entre la monarca y la mujer de su hijo.