Durante los últimos meses varias potencias internacionales comenzaron a reforzar a Ucrania ante la previsible agresión de Rusia. En un primer momento, los países europeos se abstuvieron de enviar armas, sin embargo, desde que Putin decidió invadir Ucrania el pasado 24 de febrero, varios estados miembros de la Unión Europea movieron su posición, y comenzaron a suministrar equipos armamentísticos al gobierno de Volodímir Zelenski.
La UE acordó este domingo, por primer vez en su historia, organizar y financiar, con 500 millones de euros, el aprovisionamiento de armas en una guerra en un país tercero, en este caso la que libra Ucrania contra el invasor ruso. "Hemos decidido utilizar nuestras capacidades para dar armas, armas letales, asistencia letal al Ejército ucraniano, por valor de 450 millones de paquete de apoyo, y 50 millones más para suministros no letales, como combustible y equipos de protección", anunció el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell.
Mientras que la mayoría de países europeos han decidido enviar armas a título individual, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, señaló este lunes que no contempla el envío de armamento a Ucrania por parte de España y defiende que ese envío se haga a través de la Unión Europea, tal y como ya se ha acordado en Bruselas. Sánchez defendió que la participación española se desarrollaría en el ámbito de la ayuda humanitaria y con la provisión de material defensivo como cascos y chalecos. "El material ofensivo lo vamos a vehicular a través de este fondo europeo", ha insistido el jefe del Ejecutivo antes de recordar que España es el cuarto país que más contribuye al mismo. Al ser preguntado en una entrevista en TVE, si en la decisión de no enviar armamento tiene que ver la existencia de sensibilidades distintas en el seno del Gobierno por la posición de Unidas Podemos, Sánchez no contestó directamente y recalcó que hay que ser muy conscientes del origen del conflicto.
Aparte de este envío conjunto, la mayoría de los estados de la Unión han decidido armar a Ucrania durante la última semana, y de los 27 estados miembros 18 han aportado armas de manera individual.
Polonia y República Checa
La República Checa y Polonia fueron los únicos que enviaron armas a Kiev antes de la invasión rusa, cuando las tropas de Putin se apostaban en la frontera y realizaban ejercicios de entrenamiento militar a pocos kilómetros de la frontera ucraniana. Estos países contribuyeron con munición para fusiles y piezas de artillería.
Francia y Alemania
Las dos principales potencias europeas alteraron su posición desde que Putin dio orden de invadir el país. El canciller socialdemócrata alemán, Olaf Scholz, informó dos días después de la invasión que enviaría un contundente paquete de ayuda. El Gobierno de Alemania informó de su decisión de enviar "cuanto antes" a Ucrania mil lanzagranadas antitanque y 500 misiles de defensa antiaérea Stinger pertenecientes a las fuerzas armadas alemanas. Además, comunicó el envío de 14 vehículos blindados destinados a la protección personal y, en caso necesario, para fines de evacuación, además del suministro de 10.000 toneladas de carburante vía Polonia. Ese mismo día, el presidente francés, Emmanuel Macron, anunció que su país enviaría material defensivo por un valor de 300 millones de euros.
Portugal e Italia
El gobierno portugués también comunicó este sábado del envío de material, aunque no especificó la cantidad. "A petición de las autoridades ucranianas, Portugal proporcionará equipamiento militar como chalecos, cascos, gafas de visión nocturna, granadas y municiones de diferentes calibres, radios portátiles completos, repetidores analógicos y fusiles automáticos G3", informó el ministerio de Defensa en un comunicado.
Por su parte, Italia aprobó una medida que autoriza el envío de misiles tierra-aire Stinger, morteros y armas antitanque Milan, o Panzerfaust.
Países escandinavos
La primera ministra de Suecia, Magdalena Andersson, anunció el día 27 el envío de armas antitanques, cascos y armaduras. "Suecia propone enviar apoyo directo a las fuerzas armadas ucranianas, incluyendo 135.000 raciones de combate, 5.000 cascos, 5.000 escudos corporales y 5.000 armas antitanques".
Según el ejecutivo finlandés, su Ejecutivo harán un envío de 2.5000 rifles de asalto, 150.000 balas y 1.500 armas antitanque, mientras que Noruega enviará 2.000 lanzagranadas anticarro M72, rompiendo con la tradición de no exportar armas a países en guerra o peligro de guerra vigente desde 1959.
Repúblicas Bálticas
Las repúblicas bálticas, vecinas de Rusia y muchas veces amenazadas por el expansionismo de Putin, también se sumaron a la ayuda. Desde el gobierno estonio se informó del envío de armas antitanques, los letones aseguraron aportar mísiles tierra aire y los lituanos municiones, cascos y chalecos antibalas.
Bélgica, Países Bajos, Luxemburgo y Dinamarca
El gobierno belga informó del envío de 2.000 ametralladoras y 3.800 toneladas de combustible. Países Bajos aseguró un envío de 200 misiles tierra aire, y Luxemburgo 100 armas antitanques, jeeps y material militar de campaña. El Ejecutivo socialdemócrata danés también anunció la donación de 2.700 lanzacohetes a Ucrania, un día después de comprometer material militar y sanitario, además de 50 millones de coronas danesas (6,7 millones de euros) en ayuda humanitaria.
Rumanía, Croacia y Grecia
Rumanía, vecino de Ucrania y socio de la OTAN, ha sido uno de los estados que más protagonismo ha cobrado por su posición geográfica. Además de convertirse en una de las autopistas para la ayuda militar y una de las vías de escape para los refugiados ucranianos, ha decido redoblar su apoyo con el envío de combustible, chalecos antibalas, cascos, municiones y otros equipos militares, por un importe total de 3 millones de euros. Mientras que Grecia anunció el envío de varios aviones con material armamentístico y humanitario, y Croacia ha informado que aportará material por 16 millones de euros.