El Gobierno del Reino Unido elevó este martes el nivel de alerta por posibles atentados terroristas hasta el cuarto grado en una escala de cinco, tras el ataque anoche en Austria que dejó cuatro víctimas mortales y 22 heridos.
El nivel "severo" en la alerta significa que un atentado es "altamente probable" y está solo por debajo del grado "crítico", que indica que se espera un ataque "en un futuro cercano", según la descripción que proporciona el Ejecutivo.
La ministra de Interior, Priti Patel, anunció en un mensaje la decisión, tomada en base al criterio del Centro Conjunto de Análisis sobre Terrorismo, órgano dependiente de la agencia de inteligencia nacional MI5.
No hay amenazas concretas
"Esta es una medida de precaución y no está basada en ninguna amenaza concreta. Los ciudadanos deben permanecer vigilantes e informar a la policía de cualquier actividad sospechosa", detalló Patel.
El primer ministro británico, Boris Johnson, se mostró por su parte "profundamente consternado" por el atentado en Viena.
"Los pensamientos del Reino Unido están con los austríacos. Permanecemos unidos con vosotros contra el terror", expresó el jefe de Gobierno en un mensaje en las redes sociales.
Un portavoz de Downing Street, despacho oficial de Johnson, agregó que el Ejecutivo ha ofrecido a Austria la colaboración de expertos británicos en operaciones antiterroristas para colaborar en la investigación del atentado de este lunes.
"Somos muy conscientes de la amenaza que supone el terrorismo. Nuestra policía y servicios de seguridad trabajan las veinticuatro horas del día para mantenernos seguros", declaró ese portavoz.