El sector porcino del Reino Unido recibió este viernes con "alivio" la decisión del Gobierno británico de conceder 800 visados a carniceros extranjeros, después de advertir de que podría tener que sacrificar unos 150.000 cerdos si no se reclutaba personal para los mataderos.
Mike Sheldon, responsable de porcinos del Consejo para el desarrollo de la agricultura y la horticultura, dijo que estos trabajadores adicionales supondrán una ayuda "significativa", aunque alertó de que el sector necesita un plan a largo plazo para afrontar la escasez de mano de obra.
El Gobierno anunció ayer que concederá 800 visados de seis meses que se pueden solicitar hasta el 31 de diciembre, menos de lo que demandaban los ganaderos, que por el Brexit y la covid afrontan una falta de personal que consideran que no puede paliarse con gente del país.
Según Sheldon, "no hay interés" por parte de los británicos en trabajar en mataderos, a pesar de que es una profesión cualificada y relativamente bien pagada, lo que es "frustrante".
"Es un trabajo duro, exigente físicamente, se suele trabajar en bajas temperaturas y por una razón u otra a mucha gente no le gusta la idea de trabajar en una planta de procesamiento de carne", declaró.
El directivo reconoció que el sector debe transformarse si quiere atraer a trabajadores a largo plazo, mejorando las condiciones y los planes de carrera, a fin de poder competir en un ajustado mercado laboral.
Ante la actual crisis de suministro y mano de obra en el Reino Unido, el primer ministro, Boris Johnson, ha advertido a las empresas de que no se recurrirá "a una inmigración descontrolada" para solventar las necesidades del mercado.
No obstante, ante las presiones de varios sectores, ha accedido a conceder también 5.000 visados para transportistas y el sector avícola.
