Un soldado del Ejército de Estados Unidos se ha declarado culpable este miércoles de intentar proporcionar apoyo material al autoproclamado Estado Islámico para intentar planear atentados contra militares estadounidenses en Oriente Próximo.
El Departamento de Justicia estadounidense ha informado de que el juicio se llevará a cabo el 2 de noviembre, pero avisa de que brindar apoyo material a Daesh e intentar asesinar a miembros del servicio militar conllevan una sentencia máxima de 20 años por cada delito.
La Justicia del país norteamericano ha indicado que el militar, Cole Bridges, de 22 años, se unió a las Fuerzas Armadas en septiembre de 2019, cuando comenzó a investigar y consumir propaganda en plataformas digitales que "promocionaban a los yihadistas y su ideología violenta".
"Bridges también había expresado su apoyo a Estado Islámico y la yihad en las redes sociales", reza un comunicado de Justicia, en el que agrega que el soldado comenzó a comunicarse con un empleado encubierto del FBI a quien le expresó su frustración con el Ejército y su deseo de ayudar al grupo terrorista.
Posteriormente, el soldado "brindó capacitación y orientación a los presuntos combatientes de Estado Islámico que estaban planeando ataques, incluido el asesoramiento sobre posibles objetivos en la ciudad de Nueva York, proporcionando partes de un manual de entrenamiento del Ejército y orientación sobre tácticas militares de combate.
Ayudó a miembros del autoproclamado Estado Islámico
Según indica el Departamento estadounidense, Bridges diagramaba maniobras militares específicas destinadas a ayudar a los combatientes de Estado Islámico a maximizar la letalidad de los ataques contra las tropas estadounidenses y brindó consejos sobre la mejor manera de fortificar un campamento para repelar ataques de las tropas de EEUU.