La justicia tunecina abrió una investigación judicial contra cuatro miembros del partido islamista Ennahda, principal fuerza parlamentaria de Túnez, por un delito de "tentativa" de violencia delante del Parlamento después de que el presidente del país, Kais Said, decretó el pasado día 25 la suspensión de la cámara, tal y como ha informado este viernes la agencia estatal TAP.
Según la fuente, entre los investigados se encuentran dos personas que forman parte del consejo de la Shura, máximo órgano directivo del partido, y el guardaespaldas de su histórico líder y presidente del Parlamento, Rached Ghannouchi.
Said, que apeló al artículo 80 de la Constitución, anunció medidas excepcionales que incluyen el cese del primer Ministro, Hichem Mechichi, la suspensión de la actividad parlamentaria así como la retirada de la inmunidad para todos sus diputados de manera inmediata durante 30 días; unas medidas calificadas por Ennahda de "golpe de Estado".
Tras el anuncio, Ghannouchi acudió al Parlamento junto a varios de sus diputados y la vicepresidenta de la cámara, Samira Chaouachi, pero el Ejército -que custodia el edificio- les impidió el acceso.
Sin Tribunal Constitucional
Según un decreto publicado ayer, jueves, las disposiciones del presidente podrán ser prolongadas más allá de los 30 días por decreto, dado que el Tribunal Constitucional, al que la Constitución le confiere esa competencia, aun no se ha formado.