El principal partido unionista norirlandés, el Partido Unionista Democrático (DUP, por sus siglas en inglés), ha anunciado este lunes su rechazo a sumarse al tradicional gobierno de coalición con los republicanos hasta que se resuelvan sus reservas sobre el protocolo del Brexit para Irlanda del Norte.
El líder del DUP, Jeffrey Donaldson, ha explicado que no propondrán a ningún ministro para el gobierno autónomo norirlandés hasta que se tomen "medidas decisivas" sobre el protocolo. El Gobierno británico "se comprometió en firme a proteger nuestro lugar en el mercado interno británico. No lo han hecho y vienen incumpliendo ese compromiso desde hace dos años y medio", ha declarado Donaldson, según recoge la cadena británica BBC.
Donaldson se ha reunido este lunes con la dirección de su partido y con el ministro para Irlanda del Norte del Gobierno británico, Brandon Lewis, quien ya el domingo había instado a Donaldson a sumarse al ejecutivo norirlandés, que deberá ser liderado por primera vez desde la creación de las instituciones autonómicas por el partido republicano Sinn Féin.
Victoria histórica
La líder del Sinn Féin para Irlanda del Norte, Michelle O'Neill, ha reprochado al DUP que esté "castigando a la gente". O'Neill y la presidenta del Sinn Féin, Mary Lou McDonald, se han reunido también con Lewis y también hay previstos encuentros con los otros tres partidos importantes norirlandeses: el Partido de la Alianza, el Partido Unionista del Úlster y el Partido Laborista y Socialdemócrata.
El Sinn Féin liderado por Michelle O'Neill ha ganado 27 de los 90 escaños de la Asamblea de Irlanda del Norte y es la primera fuerza política por delante del DUP (25) y el Partido de la Alianza (17). El Partido de los Unionistas del Úlster tiene nueve asientos y el Partido Socialdemócrata y Laborista cuenta con ocho escaños. La sesión inaugural del nuevo Parlamento norirlandés está prevista para el próximo viernes.
Es la primera vez que los republicanos ganan unas elecciones desde que se crearon las instituciones autónomas norirlandesas como resultado de los Acuerdos de Viernes Santo de 1998 que pusieron fin a décadas de violencia política armada en Irlanda del Norte y a la entrega de las armas del Ejército Republicano Irlandés (IRA).