BMW no es sólo una marca asociada a la deportividad y el placer de conducción. Sus innovadoras tecnologías apuntan hacia todas direcciones, desarrollando y apostando de manera firme por todo lo que a la conectividad se refiere. Así, estrena ahora la última evolución de su sistema ConnectedDrive, que estará disponible a partir de septiembre para casi toda la gama, bien de serie o bien opcional, y que establece una interconexión entre el vehículo y el exterior que permite disfrutar de un completísimo menú de servicios. De aquí a cuatro años, la marca prevé más de 5 millones de BMW circulando con este sistema incorporado. Y es que a los once mercados que ahora ya ofrecen servicios de BMW ConnectedDrive, se sumarán otros catorce durante este año. Gracias a esta reorientación, BMW es el primer fabricante de automóviles que está aplicando ya la creación de una red integral. Los clientes se benefician con una cantidad cada vez mayor de funciones innovadoras de gran utilidad.
Asi, en el caso de un cliente nuevo que adquiere un turismo de la marca, el ingreso al mundo de BMW ConnectedDrive empieza con la tarjeta SIM instalada en el vehículo. El usuario debe registrarse online a sí mismo y a su coche y, una vez registrado, puede acceder a su BMW ConnectedDrive personal que está protegido con un código de acceso. Allí puede realizar ajustes personalizados y administrar sus datos y servicios y los del propio coche.
Un sistema cuya principal novedad está en la adopción de una tarjeta SIM incorporada en el propio vehículo y montada en fábrica, por lo que el cliente sólo podrá solicitar el sistema al comprar el coche como una opción más, pero no podrá a posteriori incorporar el Connect Drive en concesionario. Una tarjeta que va instalada en la zona del maletero, en un modulo específico y sin posibilidad de manejarla por parte del cliente. A través de ella, podrá acceder a un completo menú de servicios, algunos de pago único y otros como servicios contratados por meses o años. El más básico de ellos es la llamada de emergencia inteligente nueva, con localización automática del coche y reconocimiento de la gravedad del accidente. De esta manera se acorta considerablemente el tiempo entre el incidente y la llegada de los equipos de socorro. Su coste, 190 euros.
A partir de ahí, la oferta de servicios aumenta de manera notable, como el "Info Traffic", con información en tiempo real del tráfico que encontramos en la ruta programada con recorridos alternativos para evitarlos. Al seleccionar el destino, podemos a través de la aplicación online de Google Street View conocer, por ejemplo, el hotel escogido o el restaurante en el que cenar.