Parece que Nacho Vidal se quiere situar como el malo malísimo de Supervivientes. A pesar de que parecía que había intentado reconciliarse con Suhaila, su principal enemiga en el concurso, en el último Debate se pudo ver como el ex actor porno ha decidido cantarle las cuarenta a sus amigos.
Su primer objetivo fue Christopher, conocido por su participación en reality ¿Quién quiere casarse con mi hijo?, al que acusó de haberlo dejado mal delante de su familia en una conexión en directo y de ser mal compañero. Rubén, militar y Míster Universo 2014, intentó mediar en la pelea aunque con poca fortuna, ya que Vidal seguía en sus trece. Fortu, cantante de Obús, también tuvo su ración de insultos, a pesar de que en ningún momento participó en la pelea. El actor se refirió a él como “un mojón de 61 años”, momento en el que el cantante comenzó a discutir con Vidal para defenderse.
La remolacha maldita
Su cruzada contra todo y todos no terminó ahí. Cuando llevas casi dos meses en una isla en la que tu dieta básica es pescado y arroz, cualquier alimento ajeno a ese menú es un manjar de dioses. Hasta la remolacha. Y algo tan banal como una lata de este vegetal provocó que el ex actor porno armara de nuevo la marimorena.
El actor se dirigió a Fortu, Christopher y Rubén, a los que preguntó insistentemente por la lata. Ante la callada por respuesta de sus tres compañeros, el actor les amenazó, manos en jarra incluidas, con destrozarles “la paradeta”, una especie de cabaña que se habían construido para refugiarse.
La discusión comenzó a caldearse cuando Rubén le espetó que había cogido más cantidad de arroz que el resto. El actor no dudó en continuar hablando de manera agresiva al militar a pocos centímetros de su cara, mientras que la discusión subía de tono. Vidal no dudó en llamar “pistolo” a Rubén, momento en el que el militar decidió apartarse del actor, quizá para evitar que la discusión fuera a más. A pesar de sus intentos por alejarse de Vidal, el superviviente continuó gritándole “Pistolo” y “tonto”, ante las caras de estupefacción de sus dos compañeros. Su pérdida de formas, finalmente, consiguió su objetivo: conseguir la lata.
El castigo de la dirección
Durante El Debate Raquel Sánchez Silva conectó en directo con la isla para hablar a solas con Nacho Vidal y preguntarle el porqué de su reacción. Vidal afirmó que se había sentido herido por el comportamiento de los que creía sus compañeros y de ahí su reacción. El actor aceptó que “todo había sido muy violento y muy agresivo” pero se escudó en que sus compañeros “tampoco se habían quedado cortos”.
Tras esto, Sánchez Silva le comunicó que la dirección del programa había decidido apartarle temporalmente de Playa Uva. Una decisión que parece que al actor le ha gustado mucho ya que afirmó estar agradecido por “apartarle de esas personas”.