La Radiotelevisión de Andalucía (RTVA) parece haberse sumido en la espiral de decadencia que mató a Canal 9 e hirió de muerte a Telemadrid. Ha contraído una enfermedad degenerativa que está causada por una mala gestión de sus recursos y un indisimulado control de sus contenidos informativos por parte del Gobierno regional. Este ente público volverá a cerrar un ejercicio en números rojos, pues perderá alrededor de 25 millones de euros en 2015, según lo comunicado a sus directivos en la última reunión de su Consejo de Administración, con datos a 30 de noviembre. Todo ello, en un año en el que ha vuelto a sufrir una preocupante caída de audiencia y ha registrado meses por debajo del 8% de la cuota de pantalla.
Las causas de la crisis de Canal Sur no difieren en exceso de las de otras televisiones autonómicas. La principal es que, con la llegada de la crisis económica, la Junta de Andalucía cerró el grifo y redujo considerablemente su aportación a este medio de comunicación, lo que mermó su capacidad para elaborar una parrilla de programación competitiva. En 2010, su presupuesto fue de 239 millones de euros, de los que 172 procedieron del Gobierno autonómico. En 2016, será de 162,4 millones, con una aportación de 112 del Ejecutivo regional, detallan fuentes de la cadena. La misma que en los últimos tres años.
Una quincena de directivos de Canal Sur percibe un sueldo más alto que el de Susana Díaz
Más de la mitad del presupuesto, 85,2 millones de euros, se dedicará a pagar a su enorme plantilla, conformada por 1.450 empleados, lo que le convierte en la tercera más grande de una televisión pública española tras la de RTVE (6.400 trabajadores) y la de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (2.500).
Como consecuencia de la crisis económica, se han reducido prácticamente todas las partidas de gasto de estos medios de comunicación, pero esas medidas de ajuste no se han aplicado con la misma contundencia en la de personal -entre otras cosas, por miedo a la reacción de los sindicatos-, lo que ha ahogado sus cuentas y ha reducido considerablemente su capacidad de invertir en programación. Y eso ha espantado a la audiencia.
Especialmente polémico resulta el sueldo de los 15 miembros de su Consejo de Administración, cuya función está mejor retribuida que la de Susana Díaz, que cobra 63.808 euros al año. Un acuerdo adoptado en 2012 por el Consejo de Gobierno de José Antonio Griñán estipulaba que ningún directivo de las empresas públicas de esta comunidad autónoma podría cobrar, a partir de ese momento, más que su presidente. Pero su efectividad ha sido nula en Canal Sur, donde sus altos cargos percibirán 1,54 millones de euros en 2016.
Una audiencia que cae en picado
En 1990, con los hombres de Manuel Chaves acaudillando este medio de comunicación y un año después de su puesta en marcha, Canal Sur registró en diciembre una cuota de pantalla del 24,4%. En 2007, al inicio de la recesión en España, del 18,8%. Este último mes ha sido del 7,8%. La sociedad andaluza ha dado la espalda a un canal que cada vez le resulta menos atractivo y que sigue un camino paralelo al que en su día tomó Telemadrid.
La austeridad que ha obligado a adoptar la crisis económica en materia de programación es la principal causa del descenso del share de Canal Sur, según estiman fuentes internas. No obstante, detrás de esta caída también se encuentra la pérdida de credibilidad de sus espacios informativos, motivada por el control que ejerce el PSOE sobre los mismos. “Quizá es más disimulado que en el Canal Nou de Zaplana o en la Telemadrid de Aguirre, pero se produce de forma constante”, precisan estos informantes.
En diciembre de 1990, la audiencia de Canal Sur fue del 24,4%. En 2007, del 18,8%; y, en 2015, del 7,8%
Una prueba del “excesivo protagonismo” que se concede a Susana Díaz se encuentra en que, desde el 27 de enero -cuando anunció las elecciones autonómicas- hasta el 28 de febrero, los informativos de esta televisión pública dedicaron 3 horas, 22 minutos y 8 segundos a hablar del PSOE y de la presidenta de la Junta, frente a las 2 horas, 10 minutos y 37 segundos que emplearon para informar de los populares, que fueron la opción política más votada en 2012, según recoge el PP en un informe al que ha tenido acceso Vozpópuli.
La costumbre de la casa ha sido, durante años, la de dedicar una gran cantidad de recursos a la información institucional, lo que otorga al PSOE un constante protagonismo en los noticiarios, aun en los días en que el interés se encuentra en sus rivales políticos. Eso lo han aprovechado sus responsables para “engrandecer” la figura de Susana Díaz y de su propio partido. Vista esa forma de informar, una buena parte de la audiencia ha optado por cambiar de canal.
