El Gobierno argentino ha notificado este lunes al grupo Clarín que le aplicará de inmediato la Ley de Medios Audiovisuales y, como consecuencia, licitará las licencias que sobrepasen el máximo permitido. El grupo, por su parte, ha apelado a la Justicia, confiando en poner freno a la fuerte desinversión que exige la aplicación de esta norma.
El enfrentamiento entre el Ejecutivo de Cristina Fernández de Kirchner y Clarín se ha intensificado desde el pasado viernes, cuando el juez de primera instancia Horacio Alfonso dictó la constitucionalidad de la Ley de Medios y ordenó el levantamiento de la medida cautelar que mantenía en suspenso su aplicación.
El titular de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca), Martín Sabbatella, se ha presentado este lunes en la sede del grupo de medios, el mayor de Argentina, para notificar "el inicio de la transferencia de oficio" de las licencias que excedan el tope legal tras el espaldarazo obtenido el viernes por el fallo judicial. Sabatella ha entregado a los abogados de la compañía un expediente en el que consta el "listado con todas las licencias y bienes afectados" por la ley.
Se trata de un gesto simbólico, ya que el grupo ha apelado este mismo lunes el fallo de Alfonso ante la Cámara Civil y Comercial. El proceso de transferencia puede ser suspendido en cualquier momento por un nuevo fallo judicial. En su presentación, Clarín solicitaba la suspensión del levantamiento de la medida cautelar hasta que se dicte una "sentencia definitiva" en la causa y considera que sólo a partir de ese momento "debiera comenzar a regir el plazo de desinversión de un año que establece la ley".