La reducción de sueldos con la que Cope evitó aplicar un expediente de regulación de empleo hace unos meses no ha servido para cuadrar las cuentas de la compañía participada por la Conferencia Episcopal Española. La crisis publicitaria obliga a sus responsables a plantear nuevos ajustes dada la desviación presupuestaria con la que la cadena ha cerrado el tercer trimestre de 2012.
La Dirección de la empresa reunió este miércoles a la Comisión Permanente del Comité Intercentros para explicar a los trabajadores que el resultado económico de la empresa se ha desviado considerablemente “a peor” en el mes de septiembre, al igual que ha sucedido con la inmensa mayoría de los medios de comunicación, según indican fuentes de la empresa y de los representantes de los trabajadores.
En esta reunión, el director financiero, Ignacio Armenteros, comunicó que las perspectivas de resultados en Cope para el mes de noviembre y para el primer semestre de 2013 son, asimismo, “muy negativas”. Ante esta situación, Armentero indicó que la empresa “está estudiando” una serie de “medidas de ajuste puntuales” para corregir esta importante desviación; unas medidas que les serán comunicadas al Comité Intercentros en una reunión que, según lo previsto, se celebrará a comienzos del próximo mes de noviembre.
El 75% de la plantilla de Cope aprobó en junio un recorte salarial media de un 10%. Esta medida, sumada a otras vías de ahorro implementadas, fue considerada suficiente para que la cadena terminase en equilibrio el presente ejercicio pese a un desplome del mercado publicitario que roza el 20%. Los descuentos salariales se realizaron de forma progresiva. En función del salario de cada trabajador. Desde un 5% para los que cobran menos de 18.000 € brutos al año, hasta el 12% para aquellos que superen los 45.000 €. Pero, además, la Dirección de la empresa de manera unilateral y al margen de este acuerdo, decidió reducir, en un porcentaje mayor, el sueldo de los directivos. La reducción, en este caso, fue de un 15%.
Facturó 93 millones de euros el pasado ejercicio
La Cadena Cope terminó el ejercicio 2011 sin pérdidas tras facturar 93 millones de euros, una cantidad que supone un incremento del 13 por ciento respecto al año precedente, tal y como aseguraron a Vozpópuli fuentes del sector que pusieron de manifiesto que suponía volver a cifras positivas tras dos ejercicios seguidos marcados por números rojos. El resultado, no obstante, implicaba beneficios, pero “mínimos”. Las mismas fuentes hicieron hincapié en que el cierre del año pasado se efectuó en “equilibrio”. Tanto en 2009 como en 2010, obtuvo resultados operativos negativos. En 2008, ganó poco más de 300.000 euros.
