Ya es oficial el relevo, pero se hará efectivo en mayo. Antonio Caño asumirá la dirección de El País en sustitución de Javier Moreno coincidiendo con el aniversario del diario (4 de mayo). Así lo ha anunciado a los jefes del periódico el presidente del Grupo Prisa, Juan Luis Cebrián, durante una reunión celebrada este mediodía. Este nombramiento, adelantado por Vozpópuli el domingo, llega en medio de una crisis sin precedentes en el rotativo desatada precisamente por el nuevo director, que envió por error un correo electrónico a un grupo de corresponsales cuando en realidad iba destinado solo a Cebrián. En ese email Caño incluía una suerte de informe que no ahorraba en críticas al staff dirigente y a parte de la plantilla del periódico. Ahora, la situación es bastante compleja en la redacción sita en Miguel Yuste, donde toma los mandos un periodista que se ha granjeado la enemistad o el enfado de la mayoría de sus subordinados.
A las 13 horas, el propio Cebrián, el elegido como nuevo director y el consejero delegado de Prisa, Fernando Abril-Martorell, se han reunido con los jefes del periódico y han dado a conocer los cambios en marcha. Fuentes de El País aseguran que Caño se ha dirigido a los presentes para explicar lo sucedido con el email y disculparse. El hasta ahora corresponsal en Estados Unidos ha tratado de excusarse diciendo que su famoso email se ha malinterpretado. Además, ha querido tranquilizar al equipo de Moreno asegurando que "cuenta con todos". Según las mismas fuentes, Moreno se mantiene en el puesto hasta la fecha señalada, cuando pasará a ser "responsable de contenidos de Prisa Noticias", un cargo que parece creado ad hoc.
Moreno, ninguneado
El encuentro de este martes, también revelado de antemano por Vozpópuli, llega después de una semana de locura en la redacción de El País, convertida en un hervidero de nervios, rumores y corrillos. El saliente Moreno no acudió a la reunión de portada del lunes por la tarde pese a que se encontraba en el edificio y sus compañeros dejaron la silla vacía como muestra de respeto. Era ya una evidencia que el director tenía las horas contadas. La aparición del ya célebre email de Caño había colocado a Moreno en una situación insostenible, ninguneado por su presidente, traicionado por uno de sus lugartenientes, desautorizado ante sus redactores.
El nuevo director, el quinto en la historia del rotativo, se disculpa por su famoso email y asegura que se ha malinterpretado y que "cuenta con todos"
La pura verdad es que este relevo, largamente trabajado y esperado, estaba previsto para realizarse justo antes del aniversario del diario, que se cumple el próximo 4 de mayo. Cebrián pretendía anunciar y acometer el relevo sin ruidos ni problemas, pero, en todo caso, antes de la citada efeméride. Hubiera sido un cambio tranquilo, pero el famoso email ha precipitado los acontecimientos y ha obligado a adelantar el anuncio. Se acaba así una etapa de ocho años al frente del rotativo de Moreno, que llegó a este cargo en 2006 como sustituto de Jesús Ceberio. Antes les precedieron Joaquín Estefanía y el propio Cebrián, primer director, luego directivo de relumbrón y ahora presidente. O sea, el nuevo director es el quinto en la historia del diario, antes "independiente de la mañana" y ahora "global en español", que alcanzó sus mayores dosis de poder e influencia en vida de Jesús de Polanco, creador del Imperio-Prisa, y que sigue siendo el generalista más leído en España.
El futuro
La papeleta que ahora tiene el nuevo director no es nada fácil. La situación es compleja, por no decir inaguantable, en la redacción, con altas dosis de asombro e indignación. De su ya famoso correo electrónico, una verdadera bomba de relojería, se hablará ad eternum. En la plantilla han sentado especialmente mal varias cuestiones. La primera es que el periodista sugería "una especie de ERE de la cúpula dirigente", algo que, obviamente, genera el miedo y el malestar en la jerarquía. En segundo lugar, en el informe de marras se hacía referencia a una parte de la plantilla -no constá a quién o quiénes se refería- que "tendría un espíritu revanchista", remarcan fuentes del diario. Un presunto afán de revancha que habría surgido del doloroso expediente de regulación de empleo (ERE) que costó el puesto a 130 trabajadores del diario.
El informe que elaboró Caño para Cebrián incluía críticas al staff dirigente y a parte de la plantilla; de ahí que los subordinados no estén contentos con el cambio
Además, la plantilla también está furiosa con el autor del email porque supuestamente planteaba renovar la redacción desde el punto de vista generacional. O sea, deshacerse de algunos veteranos y apostar por jóvenes mejor formados en las nuevas tecnologías. Y, para colmo de males, en Miguel Yuste están que trinan con los cambios organizativos anunciados la pasada semana, sobre todo por el relevo de Ignacio Cembrero en la corresponsalía de El Magreb, teniendo en cuenta que el Gobierno marroquí ha denunciado recientemente ante la Audiencia Nacional a este periodista por una presunta exaltación del terrorismo.
Solo Cebrián y Caño conocen sus planes para el periódico. Pero entre los empleados cunde la preocupación, amén de la sorpresa por lo sucedido, por el perfil ideológico del nuevo director. Siendo un hombre de izquierdas, dicen, ha vivido una especie de cambio de pensamiento que ha consistido, básicamente, en "derechizarse". El hasta ahora corresponsal en Estados Unidos y responsable de la edición en América Latina no representa precisamente el giro a la izquierda que muchos demandaban para adoptar una línea más beligerante frente al Gobierno del PP. Antes al contrario, sus posturas serían, siempre según fuentes del diario, las más adecuadas para seguir seduciendo a Mariano Rajoy y a Soraya Sáenz de Santamaría.
